¿ QUIÉN PAGA LOS TACOS?

Tres pequeñas tonterías que se pueden convertir en grandes problemas si no lees esto...

Por fin sales con tus amigotes a los tacos, después de meses de esperar para volver a verlos, y de repente te das cuenta de la razón por la que ya no te gustaban tanto esas reuniones: ¡siempre hay un gorrón que paga menos de lo que consumió o que se hace tonto cuando llega la cuenta! Esas son pequeñas tonterías relacionadas con el dinero que se pueden convertir en grandes problemas a menos que sigas leyendo.

1

¿Cómo dividimos la cuenta? Cuando sales con los amigos a los tacos, tú pides una ensalada de nopales, y no porque estés a dieta, sino porque es lo más barato de la carta. Pero Juan encarga tres de pastor, cinco de alambre, una gringa y dos volcanes, aparte de un guacamole para llevar. Y cuando llega la cuenta, ¡alguien propone que se pague a partes iguales! Para la siguiente vez que todos salen juntos, se ponen de acuerdo desde el principio en dividir la cuenta al parejo entre todos, entonces aquello se convierte en una competencia. Si uno pide un taco más, tú pides otro y Juan otros dos.

Empiezan a pedir hasta el flan napolitano que ni se les antoja con tal de que sea parejo. Esto es una tontería, porque al final todos terminarán pagando mucho más. ¿Cómo resolverlo?

Fácil: Hay que ser claros y decir desde un principio cuánto está dispuesto a pagar cada quien. También pueden decir que cada salida la va pagando uno, completita, como si fuera una tanda. Pero ese dice cuál es el límite de su presupuesto.

2Otra vez el primo de tu pareja está

pidiendo prestado. Te da mucho coraje, pero con tal de llevar la fiesta en paz, dejas que le preste dinero, aunque se queden ese mes sin salir ni al parque. Luego, cuando están en medio de un pleito que no tiene nada que ver (por ejemplo, porque te reclama que se te cayó la salsa cátsup), le sacas el tema y le dices que ese primo es un gorrón. ¿A poco no le hacemos así, eso de cobrarse facturas con rencores viejos cuando están discutiendo por algo diferente? Momento, momento. ¡Detente! Ese no es el camino.

La solución: Desde el principio de mes habla con tu pareja para ver si tendrán dinero para actos supergenerosos como prestarle dinero al primo. Mientras estén tranquilos, pueden decidir si él lo necesita más que ustedes, porque pobrecito, se fue de vacaciones a Los Cabos y ahora no le alcanza para la renta, o porque de verdad sí se le presentó una emergencia y es bueno para pagar.

3Tu

pareja tira el dinero. Te tengo una noticia, ya me dirás si es buena o mala. Todos creemos que cuidamos el dinero mejor que nuestra pareja, porque lo que tú ves como un capricho, a lo mejor la otra persona lo siente como una gran necesidad. No me digas que algunas de las cosas que compras no serían caprichos para alguien más. Es que todos tenemos diferentes gustos y necesidades. La solución, antes de que la forma de gastar se convierta en una guerra de reclamos, es ponerse de acuerdo desde el principio de mes cuánto puede gastar cada quien. Y si tu pareja quiere comprarse un kilo de esquites, pues ya sabrá lo que hace con su dinero.

refrán: “ANTES DE PELEAR POR DINERO, HAY QUE SABER PLANEAR”