Le baja a decibeles… pero insiste en ir contra migrantes REDACCIÓN
El Mandatario dijo que luchará por erradicar al ISIS, que protegerá a los ciudadanos edificando la barda y poniendo filtros para los inmigrantes
WASHINGTON.- Donald Trump le bajó ayer de decibles a su discurso sobre la migración, al asegurar que buscaría una reforma en la materia, incluso –según la agencia AP- consideró ante conductores de la TV en EU legalizar a los “dreamers”, aunque después ante el Congreso prometió aplicar nuevos decretos en la materia.
Trump dijo el martes que ve posible una reforma migratoria y que republicanos y demócratas pueden trabajar juntos para alcanzar esa meta tras décadas de esfuerzos infructuosos.
El Presidente de EU indicó que la reforma legislativa debe tener como guía el mejorar los salarios de los estadounidenses, reforzar la seguridad nacional y restaurar un respeto por las leyes.
“Si estamos guiados por el bienestar de los ciudadanos estadounidenses entonces creo que republicanos y demócratas pueden trabajar juntos para alcanzar una meta que ha eludido a nuestro país”, indicó.
Durante su primera alocución al Congreso, el Mandatario no adelantó cuáles medidas tiene en mente para resolver el estatus de los 11 millones de inmigrantes que residen en Estados Unidos sin autorización.
Horas antes de pronunciar su discurso, Trump dijo a presentadores televisivos que está dispuesto a considerar una reforma a las leyes migratorias que permita la legalización de numerosas personas que residen en Estados Unidos sin autorización.
Una persona al tanto de la conversación y que solicitó el anonimato, señaló que Trump aseguró estar dispuesto a conceder la naturalización de los “dreamers”, es decir, las personas que fueron traídas ilegalmente a EU cuando eran niños. Con información de AP
Creo que es posible una reforma inmigratoria real y positiva”. Pronto tomará nuevas medidas para hacer que nuestra nación esté segura”.
WASHINGTON.- “Pronto vamos a iniciar la construcción de un gran, gran muro en nuestra frontera sur”, repitió anoche el presidente de EU, Donald Trump, al hablar por primera vez ante el Congreso.
Trump ratificó su plan de expulsar a migrantes, de reformar la frontera y aseguró que su país perdió más de una cuarta parte de los empleos creados por el sector industrial desde que se aprobó el TLCAN con México y Canadá.
Trump se refirió a Canadá como aliado, sin embargo. No habló así de México. De hecho, no mencionó a México en su discurso, que fue ampliamente ovacionado por una Cámara de mayoría republicana.
“Hemos perdido más de una cuarta parte de nuestros empleos en la industria desde que se aprobó el TLCAN y hemos perdido 60 mil fábricas desde que China se unió a la Organización Mundial del Comercio en 2001”. “Resolver estos y tantos otros problemas apremiantes nos obligará a superar las diferencias de partido.
Requerirá aprovechar el espíritu estadounidense que ha superado todos los desafíos a lo largo de nuestra larga e histórica historia”.
En contaste al trato que le dio a México en su discurso (ignorarlo), el magnate dijo que acordó con el premier canadiense, Justin Trudeau, un acuerdo para apoyar con capacitación y recursos a mujeres en ambos países.
“Con la ayuda de Trudeau, hemos formado un consejo con nuestros vecinos en Canadá para ayudar a garantizar que las empresarias tengan acceso a las redes, a los mercados y al capital que necesitan para iniciar un negocio y vivir sus sueños financieros”, dijo.
INMIGRANTES, MURO FRONTERIZO Y DROGAS
Antes dijo estar abierto a una ley sobre inmigración que le dará estatus legal a algunas personas que viven sin permiso en EU y proporcionaría un camino a la ciudadanía a quienes fueron traídos ilegalmente al País cuando eran niños. En un encuentro con conductores de noticieros previo a su mensaje al Congreso, expresó:
“Es el momento adecuado para un proyecto de ley de inmigración, siempre y cuando ambas partes muestren disposición de alcanzar una solución negociada”.
Pero, ya en su discurso, no dijo cuáles medidas tiene en mente para resolver el estatus de los 11 millones de inmigrantes que residen sin autorización.
“Es un mensaje de unidad y fortaleza desde lo más profundo de mi corazón”, dijo apenas al arranque. “Nuestro aliados encontrarán que EU está listo para dirigir”.
Trump criticó que su país defendiera “otras fronteras” mientras descuidaba las suyas y las drogas inundaban a la Nación. “Hemos dejado que por nuestras fronteras entren los estupefacientes como nunca antes y hemos gastado miles de millones en ultramar y nuestra infraestructura se ha derrumbado”. “Vamos a detener el consumo de drogas”. “Vamos a ver un renacer”.
Presumió ante el Congreso que empresas que estaban en México ahora se irán a EU a generar empleos allá. “Desde mi elección Ford, Chrysler, Intel, Walmart y muchas otras, han anunciado que ellos van invertir en nuestro país y van a crear miles de empleos para estadounidenses”, subrayó Trump.
“Creo en el libre comercio, pero creo en el comercio justo”. “Se han aprovechado de nuestro país, y eso no va a volver a suceder”.
Abundó que la construcción del muro en la frontera con México “se iniciará antes de lo programado y, una vez terminado, será un arma eficaz contra el crimen y las drogas”.
Anunció el inicio de los polémicos oleoductos en el Norte, “ahorrando miles de millones a EU”. Y habló de acuerdos con Canadá en materia comercial.
“Al hacer cumplir finalmente nuestras leyes de inmigración, aumentaremos los salarios, ayudaremos a los desempleados, ahorraremos miles de mdd y haremos que nuestras comunidades sean más seguras para todos”, afirmó.