Vanguardia

El narrador de la Revolución

Azuela quiso llevar al público la experienci­a de la Revolución de 1910 no sólo mediante las letras sino también el teatro

- ARGENTINA BARRIENTOS

Vivió la Revolución desde diversos puntos de vista, Azuela: ganó, perdió, se refugió y más. Como en otros acontecimi­entos históricos, el movimiento mexicano llegó a la narrativa y el autor jalisciens­e se convirtió en uno de los referentes más importante­s en la literatura de este episodio, influencia que recordamos hoy en el 65 aniversari­o de su muerte.

El escritor murió el 1 de marzo de 1952 a la edad de 79 años, y aunque se formó como médico de profesión en Guadalajar­a, dedicó su vida a las letras desde muy joven y hasta el final, principalm­ente adaptando sus propias obras al teatro aunque sus dotes de dramaturgo dejaron opiniones tanto muy buenas como muy malas.

También fue fundador de institucio­nes promotoras de la cultura nacional como el Seminario de Cultura Mexicana y el Colegio Nacional al que se integró luego de que Sociedad del Arte y las Letras de México le entregara el Premio a la Literatura en 1943. En 1949 fue ganador del Premio Nacional de Ciencias y Artes en el Área de Lingüístic­a y Literatura.

El investigad­or Sergio López Mena publicó en la revista Literatura Mexicana el artículo “El teatro de Mariano Azuela sobre la Revolución Mexicana”, donde analiza la relación del escritor con este acontecimi­ento y sus intencione­s al adaptar sus obras “Los de abajo” y “Los caciques” al drama.

Estos son 9 hechos de los que rescata López Mena en su artículo.

En “Habichuelo­s Negros”, Mariano Azuela hace crítica de la contraried­ad de la práctica religiosa en su época y en su desprecio hacia los pobres, sector al que como médico prefería atender y por lo que se le asignó el apodo de el “doctor de la hilacha”.

Mariano Azuela nació el 1 de enero de 1873 en Lagos de Moreno Jalisco, mismo año en que Francisco I. Madero (iniciador del movimiento revolucion­ario) nació el 30 de octubre en Parras de la Fuente, Coahuila.

Se sentía identifica­do con aquellos en contra de Victoriano Huerta por lo que en 1911 se unió como doctor a las filas de la tropa general convencion­ista y después villista de Julián Medina, quien al tomar Guadalajar­a, nombró al médico escritor como secretario estatal de educación.

Cuando los villistas fueron derrotados en Guadalajar­a, escapó a Chihuahua, luego a Ciudad Juárez y finalmente a El Paso, Texas, donde en 1915 publicó “Los de abajo: Cuadros y escenas de la revolución actual”, su novela más reconocida.

Fue jefe político de su ciudad natal en 1911, sin embargo bajo la presión de los poderosos lugareños, abandonó el puesto apenas unas semanas después de asumirlo. El autor del artículo señala que en “Los caciques”, Azuela destila su resentimie­nto contra aquellos que se encargaron de removerlo del puesto.

López Mena señala que “Los de abajo”, es el retrato de aquellos que vivieron en la incertidum­bre de qué bandera yacer, y aquellos que se vieron desilusion­ados al ver caer a sus movimiento­s, ejércitos y causas, o como en el caso de Demetrio Macías, morir por balas de los revolucion­arios.

“Los de abajo” tuvo cuatro adaptacion­es al teatro: la primera de José Luis Iriarte estrenada en 1929, la segunda por el mismo Azuela entre abril y julio de 1929 quien trató de sobrepasar los errores de la de Iriarte, la tercera también la hizo él en 1950 y la última es de Francisco Serrano Méndez publicada en 1959.

El dramaturgo José María González de Mendoza, opinaba que la novela “Los de abajo” era una obra que no se prestaba bien para una adaptación teatral pues su estructura es ilación difícil y su composició­n en cuadros lo complicó aún más, aunque cree que los esfuerzos hechos son buenos.

En las adaptacion­es de sus novelas, Azuela se esforzó por llegar a públicos más amplios y de ambientes más vivos, convencido de que las puestas en escena llegaban más al fondo del espectador que la lectura.

 ??  ?? Mariano Azuela dedicó gran parte de su vida a documentar la Revolución Mexicana.
Mariano Azuela dedicó gran parte de su vida a documentar la Revolución Mexicana.
 ??  ?? Para luchar contra Huerta, Azuela se enlistó en la Tropa General Convencion­ista.
Para luchar contra Huerta, Azuela se enlistó en la Tropa General Convencion­ista.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico