¡Estamos pa’l gato!
La encuesta de Reforma publicada el pasado miércoles 26 de abril demuestra la raquítica oferta política de los tres candidatos punteros: Miguel Riquelme, Guillermo Anaya y Armando Guadiana. Veamos.
En el rubro de desempeño, ninguno de los tres supera el 31% de aprobación en cinco temas. A la pregunta ¿quién mejoraría la seguridad pública?, los tres promedian 24% contra 20% de coahuilenses que piensa que ninguno lo haría. En la mejora de servicios de salud, los tres candidatos alcanzan un promedio de 23% contra 16%. En el mejoramiento de la economía familiar, promedian 23% contra 21% que opina que ninguno. En generación de empleos, los tres promedian 23% contra 18%. Y en combate a la corrupción, su promedio de 21% queda por debajo del 23% de los coahuilenses que piensa que ninguno de los tres daría el ancho. Este dato es notable por ser el tema central del discurso opositor de Anaya y Guadiana.
La diferencia promedio, entre percepción y rechazo, del resto de los rubros (seguridad pública, salud, economía familiar y empleos) es sólo 3.2%. Lo que precisa la desconfianza del coahuilense en el desempeño de estos candidatos al llegar a la Gubernatura.
Esta situación se agrava cuando revisamos sus atributos positivos: su promedio en honestidad es de 19.6% contra 28% de coahuilenses incrédulos de que lo sean. Aquí tienen un déficit de 8.4%. En confiabilidad alcanzan un 20% contra 19%. Sólo un punto de diferencia a favor. Y en cercanía con la gente, tienen 25.6% contra 21%. 4.6% puntos a su haber. Los coahuilenses los perciben deshonestos y poco confiables, aunque cercanos a la gente.
Los atributos negativos de los tres, en promedio, son muy negativos: “Es más corrupto” (17.6% vs 42% de coahuilenses que opinan que sí lo son). “Es más mentiroso” (18.6% vs 39%). “Puede provocar violencia en Coahuila” (12.3% vs 57%). Y “tiene vínculos con el narco” (11% vs 62%).
Estamos pa’l gato. ¿O no?
NOTA
Amable lectora/lector: estaré fuera de nuestra conversación editorial del 1 al 22 de mayo. Hasta entonces, lo mejor.