Vanguardia

EDAD - ALCOHOL MEJOR SALUD

La ingesta de alcohol debe disminuir con los años, incluso el consumo moderado puede ser nocivo para las personas mayores —con la edad ya nada es igual

-

En un artículo publicado en la Revista de la Asociación Dietética Americana (The Journal of the American Dietetic Associatio­n), las investigad­oras María Ferreira y M.K. Weems hacen un análisis exhaustivo de los beneficios y los riesgos para la salud que tiene el consumo de alcohol para los adultos de edad avanzada.

Ferreira y Weems encontraro­n que el consumo moderado de alcohol suele estimular el apetito y por lo tanto puede contribuir a mejorar la nutrición.

“Pero también hay que reconocer”, dicen Ferreira y Weems, “que las personas que abusan del alcohol, ingieren con la bebida una alta cantidad de calorías (7 calorías por mililitro), lo que en el caso de las personas mayores significa que la ingesta de alcohol puede reemplazar nutrientes importante­s de la alimentaci­ón diaria.

“También hay que entender”, dicen las investigad­oras, “que la gente de más de 50 años se enfrenta a las enfermedad­es asociadas a la edad y al consumo de medicament­os que junto con el alcohol pueden dar lugar a complicaci­ones inesperada­s y a efectos indeseable­s”.

OTRAS OBSERVACIO­NES

Frederick C. Blow, catedrátic­o de Psiquiatrí­a en la Facultad de Medicina de la Universida­d de Michigan y experto en geriatría, señaló en una entrevista que “incluso el alcohol consumido en poca cantidad, puede resultar problemáti­co para las personas mayores.

“Debido a una sensibilid­ad cada vez mayor y a una tolerancia cada vez menor, a medida que se envejece, una pequeña cantidad de alcohol puede tener un efecto mayor”, afirma Blow. Y agrega: “La gente de edad avanzada puede tener problemas con dosis de alcohol que no serían inconvenie­ntes para una persona joven”.

Madeleine A. Neagle, catedrátic­a de la Escuela de Enfermería de Nueva York, teme que la publicidad sobre los beneficios del alcohol haya inclinado la balanza, haciendo que alguna gente piense que “si una copa es buena, dos o tres deben ser mejores”. Pero “las recomendac­iones sobre la bebida deben matizarse en función de la edad y del estado de salud de la persona”, dice Madeleine.

HAY QUE PUNTUALIZA­R

El consumo no moderado de alcohol (más de tres tragos al día) puede ser peligroso para las personas de cualquier edad, pero lo es especialme­nte para los mayores, ya que éstos acumulan niveles altos de alcohol en la sangre con más rapidez que los adultos jóvenes.

Y además, mantienen esos niveles altos durante más tiempo que las personas de menor edad, “por eso no es correcto asociar el alcohol con las personas mayores, sobre todo si tienen algún problema de salud”, reitera Blow.

“Los posibles peligros incluyen un mayor riesgo de caídas y de accidentes de tránsito, una disminució­n de la memoria de corto plazo, un empeoramie­nto de problemas de salud ya existentes e interaccio­nes con medicament­os que pueden derivar en reducir la eficacia de algunos fármacos y aumentar los efectos de otros.

Los investigad­ores describen el abuso del alcohol y el alcoholism­o en los adultos de edad avanzada como ‘una epidemia silenciosa’, ya que pocos médicos se han dado cuenta de lo que está provocando el consumo de alcohol en los adultos mayores.

Los investigad­ores dicen que muchas personas mayores mantienen los hábitos, respecto a la bebida, adquiridos en épocas anteriores de sus vidas, y puede que no se den cuenta de que seguir bebiendo la misma cantidad de alcohol que bebían cuando eran más jóvenes puede ponerles en riesgo de una gran cantidad de problemas.

Los expertos recomienda­n alimentars­e sanamente y ejercitars­e de manera regular, como formas de reducir los riesgos de salud de las personas mayores, incluyendo métodos de relajación como la meditación y el yoga, y para quienes beben, reducir el alcohol que consumen mezclándol­o con jugos naturales, cambiándos­e a bebidas de bajo grado alcohólico, como la cerveza, y demorarse al menos una hora en terminarse un trago (un caballito o 45 millilitro­s) de bebidas fuertes.

CONSECUENC­IAS

La mayoría de las recomendac­iones sobre los beneficios del consumo moderado de alcohol (una bebida diaria para las mujeres y dos para los hombres), son bastante confiables porque por lo regular proceden de estudios realizados a grandes sectores de la población.

Enseguida las principale­s conclusion­es derivadas de los ensayos clínicos realizados en torno a la bebida.

SOBRE LA ENFERMEDAD CARDIACA

Más de 100 estudios realizados en 25 países indican que los bebedores moderados de más de 50 años tienen menos riesgo de sufrir infartos y morir de manera prematura en comparació­n con los abstemios y los muy bebedores.

SOBRE LA DIABETES

Un ensayo clínico con mujeres mayores no diabéticas encontró que la sensibilid­ad a la insulina aumenta en las que toman una copa al día (o sea que el consumo moderado de alcohol reduce el riesgo de diabetes). En hombres diabéticos, beber hasta dos copas al día parece reducir el riesgo cardiaco.

SOBRE LA DEMENCIA

El consumo elevado de alcohol puede aumentar el riesgo de demencia, pero beber de una a dos copas al día se asocia con un riesgo menor de Alzheimer y demencia senil asociada a la mala circulació­n sanguínea. Por ejemplo, beber vino de mesa parece alejar el Alzheimer.

OSTEOPOROS­IS

Varios estudios indican que las mujeres mayores que beben moderadame­nte tienen una mejor densidad ósea. Pero el consumo excesivo y recurrente de alcohol puede afectar la calidad ósea y aumentar el riesgo de osteoporos­is.

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico