Niña que se disparó se recupera
La delegación Laguna de la Procuraduría de los Niños Niñas y Familias (Pronnif), ya abrió una investigación por el caso de la niña de 8 años que aparentemente se disparó de manera accidental cuando encontró el revólver calibre 22 de su papá.
Julián Vázquez, delegado de la Pronnif, comentó que en las primeras investigaciones encontraron que la familia es “funcional” y que no tiene problemas. “Es una familia de buenas costumbres, honorable y responsable”, apuntó Vázquez.
Aunque todo apunta a un accidente, Vázquez subrayó que no deja de ser una omisión de cuidados al no tener resguardada o desabastecida el arma. Aparentemente el arma se encontraba en un bote de ropa o en un cajón de ropa y la niña encontró el arma y se disparó.
“La mamá, al estar preparando el desayuno escucha la explosión y corre al cuarto, encuentra a la niña ensangrentada y corre a pedir la ayuda”, narró Julián Vázquez.
Así mismo, relató que supuestamente el padre compró el arma porque había recibido amenazas por parte de unos vecinos, y atendiendo las circunstancias, compra y mantiene cargada el arma.
Actualmente la menor está en la clínica 16 del Seguro Social aunque existía la posibilidad de que fue trasladada a la 71.
“La tienen en observación. Está estable, controlada, mejorando, ya respira por sí sola. Dentro de las evaluaciones médicas arroja que actualmente la bala se encuentra por el lado de la espalda por lo que le podrían hacer una microcirugía para extraer la bala”, informó el delegado de Pronnif.
El funcionario añadió que como institución tienen que valorar que los padres estén en condiciones de preservar la guarda y custodia de la niña y de otro hermano.