El sol, como compañero de trabajo
Aunque las altas temperaturas registradas en la ciudad durante los últimos días, las cuales han rebasado los 36 grados, trabajadores locales continúan sus jornadas laborales a pesar de las extenuantes condiciones climáticas.
En un estacionamiento ubicado sobre el periférico Luis Echeverría, Gabino aparca su camioneta todos los días a partir de las 09:00 horas para comenzar la venta de parasoles, mangas protectoras contra el sol y sombrillas, artículos que carga en todo su cuerpo para ofrecer a los transeúntes que al igual que él, no detienen su día por el calor.
Una motoneta moviliza a Francisco Lucio, vigilante de las calles del Mercado de Abastos Benito Juárez, quien enfundado en una cachucha y playera tipo polo de manga larga trata de mitigar los rayos solares en su piel.
A pesar del grueso de su camisa, Roberto Casas continúa empujando su carro de limpieza. Son las 12:00 del día y debe continuar 6 horas más, por lo que se acomoda su sombrero, limpia su sudor y avanza con el vehículo equipado con escoba y recogedor.
EL TRABAJO NO ESPERA
Más de 20 trabajadores del Municipio cubren sus nucas y cabezas con sombreros o pañuelos para continuar con la trasplantación de los cientos de metros de pasto en el Paseo de la Reforma. A pesar del calor, algunos calentaron su almuerzo en un comal improvisado y así obtener fuerzas para culminar las obras de rehabilitación.