LA OFENSA QUE FREDDIE MERCURY HIZO A MÉXICO
Hoy es el estreno en los cines de todo el mundo incluyendo los de nuestro país de la muy esperada biopic “Rapsodia Bohemia” cuya trama gira alrededor de su controvertido vocalista de Queen, Freddie Mercury.
Y si la controversia del cantante que en su tiempo dio mucho de qué hablar particularmente por salir a la luz su orientación homosexual a raíz de su contagio del sida a mediados de la década de los 80, esta no dejó de darse inclusive en las filmaciones de esta película al ocurrir el despido de su director original, el cineasta también gay Bryan Singer por supuesto mal comportamiento y ausencia inclusive de llamados a filmación. Ya concluida, la película ha seguido dando de qué hablar entre la crítica de quienes ya la han visto en funciones de prensa donde si bien coinciden del realismo que da el actor Rami Malek a su personificación de Freddie Mercury que le merece una indiscutible nominación al Oscar, pero también que se omitió mucho de la historia real del cantante tras bambalinas de escenarios.
Lo que sí es cierto, y como lo hemos insistido en este espacio desde su creación hace más de 20 años es que fuera de la vida personal de los artistas lo que a final de cuentas dejan a la posteridad es su obra, y en el caso de Freddie Mercury y su música es indudable el impacto que siguen causando y que justifica por mucho el que tanto seguidores como poco conocedores de su legado se acerquen a este filme para saber un poco más del indudable talento y rebeldía tanto como músico y compositor como artista sobre el escenario, rutinas que al llevar a cabo en suelo mexicano en la única ocasión en el que la banda Queen visitó México como parte de una de sus tantas giras mundiales.
Queen estaba en los cuernos de la luna tras la salida simultánea de su álbum “The Game” a mediados de 1980 así como de la película “Flash Gordon” en diciembre de ese mismo año de la cual se hicieron cargo de su banda sonora, cuando fueron contratados para presentarse como parte de la gira mundial de “The Game” en octubre de 1981 con tres conciertos multitudinarios, uno en Monterrey y dos en Puebla, acontecimiento que muchos creyeron que era broma porque desde una década antes en que se había llevado a cabo el memorable Festival de Avándaro en 1971 los conciertos de rock fueron satanizados y por tanto prohibidos para realizarse en todo el paìs, y eso aplicaba también a grupos extranjeros.
Pero nada, para sorpresa de propios y extraños, Queen aterrizó en la vecina “Sultana del Norte” el 9 de octubre de 1981 para ser el primer grupo internacional en presentarse en el Estadio Universitario pero en el primero de los dos conciertos en Puebla en el Estadio de Beisbol Ignacio Zaragoza de aquella ciudad capital el 17 de octubre, a diferencia de Monterrey la banda no hizo química con el público, en apariencia porque les molestaba que Freddy Mercury escupía agua, algo que era costumbre en sus presentaciones y les arrojaron zapatos, piedras, calcetines con tierra y botellas al escenario.
Mercury apareció entonces a mitad del concierto vestido con un gran sombrero mexicano y molesto con los presentes por las malas vibras que lanzaban les gritó: “¡Muchas gracias Puebla! ¡México, muchas gracias por los zapatos, adiós amigos, hijos de su madre, adiós, bola de tacos!”. A pesar del incidente, Queen cumplió con su segunda presentación en Puebla al día siguiente con mejores resultados, despidiéndose al final Mercury diciendo “¡Gracias por ser un público muy distinto esta noche! ¡Muchas gracias!”, sin saber que sería su despedida definitiva de escenarios mexicanos.