EL ÁRBOL DE SANGRE
Además de las ofertas de películas españolas ganadoras del Goya que recomendamos en la columna de la semana pasada, Netflix estrenó en días pasados una no menos recomendable cinta de un reconocido director español.
El filme en cuestión se titula “El Árbol de Sangre”, y es de la autoría de un realizador que junto a un compatriota suyo como Alejandro Amenábar (“Tesis”; “Abre los ojos”) le dio un “segundo aire” al nuevo cine español de los años 90 a partir de su memorable ópera prima “Vacas”, de 1991 seguida por “La Ardilla Roja”, cinta de 1993 que al ver el legendario Stanley Kubrick se dice que recomendó a Medem con Steven Spielberg para dirigir “La máscara del zorro” (Martin Campbell, 1998) pero que desistió en hacer por dedicarse a proyectos más personales y de esa negación surgió en 1998 “Los amantes del círculo polar”, protagonizada por Najwa Nimri y Fele Martínez considerada la mejor de su filmografía por sus seguidores y que en Saltillo pudo ser vista en la edición Muestra Internacional de Cine de su año.
De hecho, “El Árbol de Sangre” podría decirse que retoma elementos de las mismas “Vacas” y “Los Amantes del Círculo Polar” con las audacias sexuales de “Lucía y el Sexo” (su primer apelícula del nuevo milenio que le diera a la actriz Paz Vega un más que merecido Goya a la Mejor Actriz de su año) para contarnos la historia de Rebeca (Úrsula Corboró) y Marc (Álvaro Cervantes), dos estudiantes de cine que viajan juntos a escribir un guion juntos en la finca rústica de los abuelos de Rebeca cuya familia comparte una historia paralela con la de Marc y que a través de este proyecto se proponen desentrañar.
La historia se remonta 25 años atrás cuando Macarena (Najwa Nimri, de “Los Amantes del Círculo Polar”), quien es una famosa cantante de rock que se retira al enterarse de su embarazo y Nuria (Lucía Delgado), la madre de Marc quien es forzada a abandonar su casa de verano al ser advertida por el misterioso pero también atractivo Olmo (Joaquín Furriel) de que la vivienda va a ser tomada por un grupo de mafiosos rusos para tomarla como centro de operaciones de España. Este es tan solo el inicio de una serie de relaciones peligrosas entre las dos familias en las que la sangre será un leitmotiv de la historia acompañada del árbol del título el cual, ubicado en la finca a donde acuden los nuevos amantes a escribir su guion es el testigo mudo de todos estos acontecimientos.
Como mencionamos al inicio de este comentario, “El Árbol de Sangre” que desde sus primeras escenas tiene presente en los alrededores en la finca que visitan los protagonistas las vacas de la ópera prima del director pero con el detalle temático de aquella de dos familias rivales pero también de un par de amantes que alrededor de un círculo, en el caso de nuestra recomendación el tronco de un árbol alrededor del que se entrelazan el destino, el infortunio y el amor. Bien sea un seguidor de la filmografía de Medem o apenas lo está descubriendo a través de esta su más reciente película, es otro de los grandes exponentes del cine español de finales del siglo XX a quien vale la pena seguirle la huella.