Yalitza
Esta mixteca-triqui tiene mucho que aportar a los suyos y a los mestizos mexicanos en términos de la reconciliación que se hace necesaria en estos tiempos
En las últimas semanas es mucha la fascinación que ha provocado ver a Yalitza Aparicio en las alfombras rojas de los principales eventos sobre cine en el mundo. Detrás de esta menuda actriz de piel magnífica y ojos expresivos hay un ser humano muy consciente de sus raíces y de su compromiso con el futuro.
Sin menoscabo de su genuino manejo corporal que dice mucho más que los atuendos glamorosos con los que la han vestido, Yalitza se ríe ampliamente frente a las cámaras de los reporteros. Sabe que su aspecto físico llama la atención de quienes la ven; Oaxaca, tierra de sus ancestros, ofrece al mundo un nuevo personaje. En Tlaxiaco nació el gran artista plástico Rufino Tamayo.
Yalitza, tal como las mujeres istmeñas son educadas poniendo el acento en la dignidad y seguridad que debe revestir su presencia femenina, subrayándoles que son independientes del hombre y que no necesitan precisamente de uno para su realización personal. En las danzas folclóricas de la región las mujeres toman el centro de atención siendo perseguidas con veneración por los varones mientras que ellas se muestran altivas e inalcanzables.
Además la manera en que visten sus trajes indígenas les hace resaltar su belleza avellana, por ello cuando Yalitza aparece en espacios públicos dedicados a reverenciar la manera de vestirse de las actrices a merced de las grandes firmas de moda; hace voltear a la concurrencia.
Pero Yalitza es felizmente una maestra de educación preescolar orgullosa de su profesión que fue alcanzada por la visión genial del productor Alfonso Cuarón, quien vio en ella las características y talentos para estelarizar el film “Roma” que, aunque de tiempos lentos y en blanco y negro, deslumbra a quienes la hemos visto por su discurso fotográfico.
Con 25 años y un manejo fluido del español, Yalitza Aparicio sabe de sus raíces mixtecas y triquis, ella es una indígena mexicana que ya está siendo relacionada con los grandes temas de la discriminación y la marginación mundial. Nada menos, esto se observa en la serie de imágenes de ella junto a la valla fronteriza en Tijuana. Ya es un símbolo ante los agravios de los poderosos, ya representa a una gran masa de personas que por siglos han sido desplazados e ignorados. Ella lo sabe y ese será su rol principal.
Independientemente de que continúe su carrera como actriz de cine, lo que no será fácil porque la encasillarán en roles semejantes al de Cleo; ella puede tener un papel significativo en la nueva trama de resignificación de los indígenas en el actual Gobierno Federal, porque a todas luces López Obrador es un político que reconoce en los indígenas mexicanos un baluarte que hay que poner en valor a la vista de propios y extraños.
Los oaxaqueños se distinguen por su cohesión social y su productividad. Yalitza Aparicio Martínez no es la excepción. Estuve en el pueblo de Zipolite en donde conversé con el núcleo semilla del Consejo de Visiones que preside moralmente Ana Ruiz. Los recibiremos en Bustamante, N.L. próximamente, lo que significará un gran compromiso porque ellos harán tequio con la comunidad de este pueblo mágico.
Yalitza y el mar serán un referente de la filmografía mexicana, y esta mixteca-triqui tiene mucho que aportar a los suyos y a los mestizos mexicanos en términos de la reconciliación que se hace necesaria en estos tiempos, en los que el encuentro con la identidad nos hará más libres y fuertes como ciudadanos de un país multiétnico: a pesar de los Sergio Goyri.