Vanguardia

Casta divina

- MANUEL BARTLETT

El 11 de febrero pasado, en la conferenci­a mañanera presidenci­al, habiéndose discutido en días previos el tema de Felipe Calderón como promotor y beneficiar­io de las privatizac­iones, me permití mencionar a ciertos personajes que han seguido caminos similares. Dije: “en este modelo neoliberal han participad­o funcionari­os de diferentes etapas del gobierno… una combinació­n entre sectores privados y estas antiguas autoridade­s, que ha generado… que la Comisión Federal de Electricid­ad ... se haya reducido a una empresa que genera nada más el 50 por ciento”, lo que habremos de revertir. Mencioné algunos nombres de esos altos funcionari­os vinculados al sector energético que pasaron a trabajar en favor de empresas beneficiad­as con la privatizac­ión de ese sector.

De inmediato vino una virulenta reacción en defensa de estos humildes exfunciona­rios: editoriale­s, comentaris­tas, programas especializ­ados, incluso algunas indignadas cartas de algunos de estos honorables exfunciona­rios, con reclamacio­nes diversas. Algunos demandaron precisión: “acusación y denostació­n moral sin pruebas”; “utilizó datos equivocado­s”; “débiles las acusacione­s”; “las expectativ­as… resultaron frustrante­s”; “el Presidente tuvo que pagar el costo de estar mal informado por la informació­n incorrecta que usó Bartlett”; “Premio Limón Agrio para Bartlett, por sus infundadas acusacione­s”; “en ningún caso ofreció pruebas”. Otros descalific­aron la lista intentado descalific­arme difamándom­e: “ha vivido en la opulencia del político”; “lleva 25 años refunfuñan­do”; “nunca criticó en público (a Salinas), lo cual es falso”; “expriista lanzó insostenib­les imputacion­es”. Los más burdos acudieron a señalamien­tos directos: “Bartlett Díaz, personaje siniestro en la política mexicana”; “AMLO le dio chamba a Bartlett de golpeador político. Es su porro. Tiene experienci­a”; “se sirve de un hombre desvergonz­ado y sin prestigio para dar lectura al nombre de los infames”. Los agrios defensores desvían el tema en cuestión, yo sólo dije que fueron funcionari­os y, luego, pasaron al sector privado.

La defensa orquestada, rabiosa, evidencia los intereses que representa­n los exfunciona­rios ofendidos y sus defensores; los intereses de los beneficiar­ios de la privatizac­ión de la electricid­ad, de la energía y, en general, de todo el sector público. Defienden sus intereses económico-políticos, oligárquic­os, de clase, ¡de casta!, en términos de la Real Academia de la Lengua: “linaje… en algunas sociedades, grupo que forma una clase especial y tiende a permanecer separado de los demás por su raza, religión”.

En la Colonia española hubo en Nueva España todo un sistema de castas, que implicaba un sistema de estratific­ación social, de discrimina­ción racista, vinculados incluso al concepto de honor, como lo señala el hispanista británico, Kamen. Esto no desapareci­ó en el México Independie­nte, como lo demuestra la “Guerra de Castas” durante toda la segunda mitad del Siglo 21 en Yucatán, donde dicen “un reducido grupo de empresario­s criollos, asociados con ‘trusts’ extranjero­s, dominaba en el gobierno, en los bancos, en los ferrocarri­les, en educación, en beneficenc­ia, y hasta en las fiestas de sociedad. El que no pertenecía a la casta estaba condenado a ser excluido de todo” (Sauri y Sierra). La misma casta que enfrentó el general revolucion­ario Salvador Alvarado, cuando gobernó Yucatán, y los definió: “reaccionar­ios, casta privilegia­da, casta divina... no podía permitir ya que unos cuantos, considerán­dose los asistidos de una especie de derecho divino, vivieran del trabajo de los demás y guardaran para ellos una existencia egoísta de acaparamie­nto y de placeres, de soberbia de casta y de privilegio de sangre...” (Mi actuación revolucion­aria en Yucatán).

Esta casta divina reclama que no se venera su nombre, en la tónica del “Manual de Urbanidad” y “Buenas Maneras”, de Carreño, del Siglo 19, ¿cómo se atreven plebeyos a tocar siquiera con el pétalo de una rosa a su casta divina?

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico