CESA TRUMP A BOLTON, EL ‘HALCÓN’ DE LA GUERRA
Despide a su asesor de Seguridad Nacional, quien a su vez afirmó a los medios que fue él quien dejó el cargo
WASHINGTON, EU.- El presidente estadounidense, Donald Trump, anunció ayer el despido fulminante de su polémico asesor de Seguridad Nacional, John Bolton, después de meses de desacuerdos en temas clave de su política exterior, como Venezuela, Irán, Corea del Norte y Afganistán.
En dos tuits, Trump rompió la relación con uno de los miembros más conocidos y criticados de su equipo, un “halcón” con fama de intervencionista que contribuyó a aumentar las tensiones con Irán y puso a la Casa Blanca en pie de batalla contra lo que definió como una “troika de la tiranía” en Venezuela, Cuba y Nicaragua.
“Informé anoche a John Bolton de que ya no se requieren sus servicios en la Casa Blanca. Tuve fuertes desacuerdos con muchas de sus sugerencias, igual que otros en el Gobierno... Por ello, le pedí a John su dimisión, que me fue entregada esta mañana. Agradezco mucho a John su servicio. Nombraré a un nuevo asesor de Seguridad Nacional la próxima semana”, agregó.
‘YO RENUNCIÉ’
Bolton no tardó en dar su versión, al afirmar en su cuenta de Twitter: “Ofrecí mi dimisión la pasada noche y el presidente Trump dijo: ‘Hablemos mañana sobre eso’”.
El ahora exasesor envió luego mensajes a varios periodistas en Washington, entre ellos uno de los presentadores de la cadena Fox News -la favorita de Trump-, Brian Kilmeade, quien lo leyó en directo: “Me acaba de escribir John Bolton. Dice: ‘Dejemos esto claro, yo renuncié’”.
La cadena de televisión CNN aseguró que Trump y Bolton discutieron el lunes por la noche sobre el plan del presidente de reunirse con líderes talibanes en Camp David (Maryland), una iniciativa que el mandatario canceló finalmente tras un ataque del grupo insurgente en Afganistán.
FRACASO EN VENEZUELA
La relación entre Trump y Bolton llevaba meses deteriorándose -al menos desde mayo- cuando el presidente dio señales de frustración por la falta de resultados a la hora de derrocar al presidente venezolano, Nicolás Maduro, después de que Estados Unidos iniciara en enero una campaña para “trepar” al poder al opositor Juan Guaidó, algo que no tuvo el apoyo popular en Venezuela.