¡ ADIÓS EN HOMBROS!
El rejoneador español puso fin a su carrera en La Monumental como el gran triunfador de la corrida de aniversario al salir en hombros luego de cortar dos orejas
El rejoneador Pablo Hermoso de Mendoza aprovechó el escenario perfecto y cerró con broche de oro su historia en la Plaza México al cortar dos orejas y lucir con su toreo a caballo, para ser el triunfador y salir en hombros.
En la corrida de aniversario del Coso de Insurgentes, el público respondió y una vez más provocó el lleno.
Mostrando como siempre su maestría, el dominio de sus cabalgaduras y la exactitud en casi todos los adornos que dejó en el morrillo, Pablo conmocionó al público que volvió a agotar el boletaje en la plaza más grande del mundo.
Al son de Las Golondrinas, el caballista navarro fue construyendo una faena que será recordada por muchos años.
Los gritos de “torero, torero” y el muy futbolero “olé, olé, olé, Pablo, Pablo” retumbaron en la monumental capitalina.
La salida en hombros, en la que lo izó su hijo, fue la culminación de una trayectoria de 24 años que vivió Pablo, como un romance con el público capitalino.
Lo mejor de la tarde llegó con el último astado, las “Golondrinas” sonaban y el español lució feliz en la lidia. El toro “Manuel” de los Encinos se prestó al lucimiento, embistiendo y presumiendo bravura. Emocionó con su categoría y mató de gran forma, por lo que de inmediato el público estalló de emoción y pidió las dos orejas.
Con su primer enemigo, Hermoso de Mendoza no logró hacer grandes cosas. Mostró su experiencia al lidiar a un toro que por momentos se mostró débil. Toreó de frente arriba de un caballo que es nieto de ‘Cagancho’. Clavó el rejón de muerte y recibió una tibia ovación.
La tarde tuvo también su interés por el buen juego del encierro de Los Encinos y la actuación triunfal de los toreros mexicanos Ernesto, Javier Tapia “El Calita” y Arturo Gilio, quienes cortaron una oreja por sus cualidades.