La relación entre el estrés laboral y las sicopatologías más comunes
El estrés laboral está reconocido por la OMS como uno de los problemas más comunes en el ámbito laboral, una forma de malestar que viven diariamente millones de trabajadores en todo el mundo.
Se trata de un problema de salud pública que sufre más del 45% de los trabajadores de todos los países del mundo, según el Observatorio de los Recursos Humanos, y que afecta de manera decisiva tanto a su salud física como mental.
En la actualidad el estrés laboral es la segunda causa de baja laboral en la Unión Europea, y un 28% de los europeos padece este problema. Pero además de hacernos sentir mal y afectar a nuestro rendimiento en lo profesional, el estrés laboral es capaz de interactuar con varias sicopatologías, ya sea facilitando su aparición o reforzando aquellas que la persona ya había desarrollado antes.
El vínculo entre el estrés laboral y los trastornos sicológicos.
Éste es un breve resumen acerca de cómo el estrés laboral puede relacionarse con las principales patologías que surgen en la salud mental de las personas.
1. Trastorno de ansiedad generalizada
Una de las principales alteraciones de la salud mental que se desarrollan en personas con altos niveles de estrés en el trabajo se engloba en los trastornos de ansiedad, y dentro de este grupo, el trastorno de ansiedad generalizada es la manifestación más habitual.
El hecho de no ser capaz de relajarse ni en el trabajo ni en el tiempo libre (porque la persona sigue pensando en sus responsabilidades y tareas acumuladas y no baja la guardia) genera una aparente necesidad de estar siempre alerta por los posibles imprevistos que generarían trabajo extra con el que no contábamos y de ahí surge ansiedad generalizada.
Además de eso, esta ansiedad también puede ser derivada de un elevado nivel de excelencia o de rendimiento en el trabajo promovido por los superiores y jefes de todo tipo, lo que puede generar también miedo y angustia en la persona.
2. Depresión mayor
La sensación de estancamiento por no poder avanzar ante todo el trabajo acumulado puede conducir a una sensación de estancamiento vital, y de ahí a la depresión mayor, trastorno que también es muy habitual en las personas de todo el mundo.
La depresión constituye uno de los principales trastornos de la salud mental y elementos un lugar de trabajo con sobrecarga de tareas, un ambiente laboral tóxico o unos niveles de exigencia elevados puede acabar provocando esta patología tan grave para la salud mental.
3. Trastornos adictivos
Los trastornos adictivos, ya sean químicos (como es la adicción a las drogas) o comportamentales (como la ludopatía) también pueden estar causados por el estrés laboral en cualquier trabajador.
Esto sucede, de nuevo, en ambientes laborales difíciles, donde el trabajador no se siente realizado, tiene mucha presión, sus superiores le dificultan su trabajo y le exigen mucho o simplemente no es feliz en su posición. La necesidad de evadirse de cualquiera de estos problemas en el trabajo o de tener “energía extra” para afrontar mejor las jornadas laborales puede llevar a la drogadicción con sustancias como el alcohol o la cocaína.
4. Trastorno obsesivocompulsivo
La búsqueda de perfeccionismo al trabajar puede ocasionar el desarrollo de un trastorno obsesivo-compulsivo, un fenómeno bastante habitual en puestos de trabajo donde el empleado es sometido a una gran presión.
La necesidad de hacer las cosas lo mejor posible, un perfeccionismo patológico y una falta de descanso se relacionan con este trastorno. Es importante aquí destacar la importancia de descansar correctamente y de desconectar de vez en cuando para evitar la aparición de casos de TOC.
5. Síndrome de Burnout
El síndrome de Burnout o del trabajador quemado es la alteración clásica que sufren los trabajadores con sobrecarga de trabajo, de responsabilidades o de tareas que no pueden delegar a nadie más o con las que no dan abasto.
Se trata de un trastorno de la salud mental en el que se combinan síntomas ansiosos y depresivos, cuyos efectos en la salud mental y afectación en la personalidad y la motivación de los trabajadores son conocidos por los profesionales de la salud.
Para evitar la aparición de un síndrome de Burnout o del trabajador quemado es importante descansar correctamente, tener tiempo y espacio para uno mismo, no sobrecargarse de trabajo y poder delegar en todo momento tareas accesorias a otros compañeros o subordinados.
6. Ataques de pánico
Los ataques de pánico son alteraciones de salud mental que se basan en episodios repentinos e inesperados de terror y miedo muy intenso, acompañados de otros síntomas físicos de malestar y angustia.
Los ataques de pánico suelen durar de 5 a 20 minutos e incluso varias horas y se relaciona con elevados niveles de estrés laboral o bien a partir de una vivencia desagradable y traumática que afecta de manera intensa en la persona.
7. Trastornos del sueño
El insomnio y los déficits cognitivos ligados a la falta de descanso también pueden aparecer tras experimentar durante varios días o semanas estrés laboral intenso y pueden ser muy variados según las características de cada persona.
Los déficits cognitivos más habituales suelen ser la pérdida o disminución de la memoria, la disminución de la atención, la pérdida de habilidades para resolver problemas rápidamente o la disminución de habilidades para el aprendizaje de conceptos o información importante.