Monterrey y San Pablo: Algunos logros y retos sociales
Las ciudades de Monterrey y San Pablo (Brasil), se disputan el liderazgo industrial con respecto a las del resto de América Latina, alrededor de cada una de ellas, se han conurbado capitales municipales, dando lugar a extensas y dinámicas zonas metropolitanas, las cuales han contribuido para el crecimiento de otras ramas de la economía, complementarias a la metalmecánica y alimenticia, como la de servicios, comercial y financiera. Sin embargo, ambas capitales subnacionales tienen desafíos diferentes en cuanto al tipo de problemática social que enfrentan, y que ha sido parte sustantiva de las demandas sentidas de la sociedad regiomontana y paulista. Para hablar de ambas economías en forma objetiva, se debe considerar que, el país carioca se ubica entre las 10 economías de mayor capacidad en el mundo; el estado de San Pablo, genera 33.9% del PIB; y 21.9% de los brasileños viven en esa ciudad (Fuente: https://www.google.com, 2019); mientras Nuevo León, contribuye con 8.0% al PIB mexicano, y allí radica 4.6% del total de la población de México (Fuente: INEGI, 2020). Con una mirada general a los números económicos, arrojan que Monterrey lidera el valor de la producción industrial, y también se lleva el primer lugar nacional en la riqueza que produce el sector construcción, además, presenta la tasa de informalidad laboral más baja, que la nacional, la cual es mayor 1.25 veces a la regia. (Fuente: El Financiero, enero 2020).
San Pablo. Cuando se habla de San Pablo, la asimetría económica adquiere tintes poco moderados. El gigante suramericano, no ostentaría ese adjetivo, sin la economía de los paulinos, que albergó e integró, en el ocaso del siglo XIX, y la mitad del siguiente a emigrantes europeos (italianos, alemanes, etc.), que vinieron con una mentalidad muy orientada a aprovechar las bondades del mercado, sobre todo cuando los recursos naturales sobreabundan, la competencia no existe y la mano de obra nativa posee un bajo grado de escolaridad. Sus descendientes, y por supuesto los citadinos la han convertido en granero del mundo, capital industrial y financiera del subcontinente americano. Brasil, como dijo un político argentino, es el “hermano mayor” de sus vecinos hispanoamericanos. Su lado oscuro y estigma han sido los pobres, que habitan en favelas, que componen poblaciones míseras, que los guías turísticos tratan de encubrirlas de la mirada avispada del visitante que recorre los circuitos turísticos en San Paulo. La pobreza económica, aunque no siempre, “multiplica” los males de carácter económico y social (desempleo, baja productividad, salarios precarios, delincuencia, prostitución, pandillerismo, drogadicción, suicidios, etc.), particularmente cuando las condiciones socioeconómicas han sido desfavorables e injustas para el grueso de la población por décadas.
Nuevo León. Quizá el problema más añejo y crítico de Monterrey, sea su déficit hídrico. La falta de agua para consumo humano, se ha convertido en una esquiva herencia política, cada gobernador neolonés la pasó a su sucesor, graciosa práctica, que no se interrumpió por el cambio de colores partidistas que los cobijaron. La alternancia política y el voluntarismo no han sido suficientes para encontrar la solución al desabasto de agua. Una frase que la prensa regia le atribuye al presidente de la republica (2018-24), y que sin apartarla de su contexto, da una semblanza de lo que está pasando con el agua. ¿“cómo garantizarle el agua y la infraestructura para abastecer a la Gigafactory”? (Fuente; El Norte, 19/02/23). Con la probable llegada de Tesla a Santa Catarina, será de sentido común pronosticar un desabastecimiento adicional al que se tiene, que implicaría un oneroso costo social. Porque la demanda de agua de la ciudad desde hace tiempo, técnicamente ya excedió la capacidad de abastecimiento de las fuentes hídricas que la suministran.
Brasil y México. Los retos que tienen los gobernadores frente a sus gobernados no son nada fáciles. Solo por mencionar algunos: frenar la delincuencia y bajar los índices de pobreza que socaban la paz social y trastocan los derechos universales del hombre en San Pablo; en Nuevo león dotar a la población de un servicio de agua regular y de calidad, y lograr un equilibrio, o al menos tratar de aproximarse a él, entre progreso económico y la capacidad del estado para sustentarlo.
Perfiles. Los gobernadores de los dos estados: T. Freitas (2023-29) y S. García (2021-27), comparten ciertas características, los dos tienen menos de 50 años de edad; y han manejado la política desde una perspectiva más administrativa y pragmática, que de corte ortodoxo, apegada a principios e idearios partidistas. El Gobernador de San Pablo, antes de ser electo, ocupó diferentes cargos en la Administración federal, independientemente de que fuera presidida por presidentes de distintos partidos, como el de los trabajadores (PT) y el de la Social Democracia Brasileña (PSDB).