Recorta el ‘Plan B’ facultades del INE
Mantendrá a raya al organismo electoral ante las decisiones de los partidos políticos
La reforma electoral no sólo suaviza las reglas para que el Instituto Nacional Electoral (INE) fiscalice a los partidos políticos, también lo limita para entrometerse en sus decisiones internas.
Con el “Plan B”, el organismo electoral no podrá emitir acuerdos, lineamientos o reglamentos que regulen el proceso de postulación de candidaturas de los partidos.
Reguló la violencia política de género y estableció límites para que quienes la hubieran ejercido no pudieran ser candidatos.
Para rematar, les exigió establecer en sus documentos básicos ambas disposiciones.
En el 2021 ordenó a los partidos a entregar al menos 50 candidaturas a diputados federales a jóvenes, indígenas, migrantes, representantes de la diversidad sexual, personas con discapacidad y afromexicanos, a través de acciones afirmativas. Ahora, con la nueva reforma, esas posiciones disminuyen a 25.
El INE también reguló por acuerdo la sobrerrepresentación en el Congreso y los requisitos para la reelección de diputados, al no existir una legislación secundaria. Ahora se les ordena atender estrictamente lo que dice la ley.
Morena agregó el párrafo 11 BIS en la Ley General de Instituciones y Procedimientos electorales
para advertir lo siguiente:
“Las autoridades electorales () En ningún caso podrán resolver nombrando dirigentes y candidatos o determinando cualquier acto que interfiera en forma directa en las decisiones de la vida interna de los partidos.
“Los partidos políticos, en ejercicio de su autodeterminación y autoorganización, tienen en todo momento el derecho a elegir a sus dirigentes y a sus candidaturas conforme a los procedimientos señalados en sus documentos básicos, sin la intervención de ninguna autoridad electoral”.