Avances tecnológicos en la Medicina
La pandemia causada por el Covid-19 ha tenido consecuencias perversas en la salud de la humanidad y, desde luego, en el sector económico. Día tras día aparecen noticias que hablan del incremento del desempleo y la caída de ingresos en amplios sectores de la población, ante la incapacidad y falta de recursos de los gobiernos para hacer frente a este contagio viral, que sorprendió a propios y extraños.
No obstante, no todas las noticias son negativas; en la historia de la población planetaria, en etapas cercanas o remotas, cuando se han presentado situaciones difíciles como luchas armadas, desastres naturales, hambrunas, epidemias u otras, un factor que ha ayudado a salir adelante y vencer los obstáculos naturales o aquellos provocados por el hombre, era el desarrollo tecnológico, comandado, en su momento, por hombres visionarios que, aprovechando el amplio acervo científico heredado, han sabido crear o descubrir los antídotos apropiados para lograr una existencia de mayor bienestar social. Por supuesto que se presentaban asimetrías entre los países ricos y pobres, estos últimos, casi siempre esperaban que las patentes o licencias vencieran, o un gesto de solidaridad de los laboratorios y farmacéuticas que comercializaban los medicamentos, para disponer del producto a precios razonablemente accesibles.
Un caso triste, pero real, ha sido el de algunos países del continente africano y su lucha en contra del VIH, pues no disponían de los recursos monetarios suficientes para la compra de medicamentos, indispensables en el control de esa enfermedad, porque los proveedores internacionales no reaccionaban de una manera filantrópica, o mejor dicho, menos lucrativa ante la emergencia sanitaria.
Actualmente hay proyectos en fase de experimentación, que de concretarse sin ninguna duda aumentarán las probabilidades de calidad y cantidad de vida de las personas. Uno de ellos es el que lleva a cabo la empresa Neuralink, cuyo accionista es el físico y economista Elon Musk, empresario que ha diversificado el giro de sus negocios, que se ocupa con el mismo entusiasmo en el transporte comercial mediante cohetes espaciales, que en investigaciones de carácter neurotecnológico.
Neuralink, compañía de vanguardia, trabaja en fase de experimentación, la relación entre inteligencia artificial y el cerebro humano. En una primera fase, su objetivo es rehabilitar a las personas que han padecido alguna lesión cerebral, que les impide volver a la vida productiva. La parte entendible o simple de la tecnología que ha estado implementando consiste en colocar una serie de sensores en la cabeza del candidato a este tipo de “implantes”, que son manejados desde el exterior por una aplicación electrónica.
Desde la óptica económica, este tipo de avances contribuyen a elevar los niveles de productividad de los trabajadores, y la generación de empleos especializados en robótica y nanotecnología. El sector de la electrónica, que participa en forma dinámica en la economía de Jalisco, será uno de los más beneficiados por la demanda de dispositivos que se requerirán para suministrarlos a hospitales y centros de investigación de alta especialidad. La economía mexicana probablemente se integre de manera rápida a la ola de innovaciones en la medicina digitalizada, lamentablemente pasará tiempo para que estos beneficios para la salud de los trabajadores se incorporen a los satsfactores de las clases menos favorecidas económicamente.