A Carlos Recio Dávila
Hizo una investigación hurgando en archivos, mercados y otras instancias
La primera fotografía tomada en México fue la mañana del 29 de enero de 1840 y se le atribuye al francés Jean Prelier. Con una enorme caja negra de madera, soportada por un tripié de igual material, se plantó en el antiguo Zócalo de la Ciudad de México para plasmar la primera imagen mediante el procedimiento fotográfico desarrollado y perfeccionado por Louis Daguerre.
De aquella caja negra salió la Catedral Metropolitana “perfectamente copiada”, informarían los periódicos de la época al día siguiente. En Saltillo existen evidencias fotográficas de 1847 durante la invasión norteamericana.
Coleccionar imágenes posteriores a ese tiempo, las del periodo llamado de la época de oro de la fotografía mundial de 1900 a 1914, llevó al doctor en Historia por la Universidad Lyon, Francia, el saltillense Carlos Recio Dávila, más de 20 años de su tiempo e inversión de recursos económicos en un trabajo aplicado e intencionado para recuperar para la historia de la ciudad de Saltillo más de 54 fotografías, la mayoría postales que viajeros extranjeros enviaron a sus familiares desde Saltillo a Europa y Estados Unidos, principalmente.
Recio Dávila hizo una gran investigación e inversión hurgando en archivos, mercados y otras instancias, sobre todo en países del viejo continente.
La colección fotográfica que reconstruye casi tres lustros de la historia de nuestra ciudad, está contenida en un espléndido libro editado por el Ayuntamiento denominado Saltillo, Imagen y Memoria”.
La primera pieza fotográfica la adquirió Recio Dávila en una feria de Tarjetas Postales que se desarrolla en diferentes ciudades de Francia. Esta ocasión le tocó en Lyon, donde él radicaba como estudiante del doctorado en Historia.
Entre miles de tarjetas encontró una postal de Saltillo de 1904, que representa a unos vendedores de caña de azúcar frente al ahora Mercado Juárez, originalmente enviada dicha imagen a un pueblo de Cataluña, España.
A partir de entonces, Recio Dávila se dedicó 20 años a recolectar postales de Saltillo en el extranjero de la época de oro, que en Europa corresponde a la segunda Revolución Industrial y que concluye abruptamente con la Primera Guerra Mundial. En México ese periodo concluye con la Revolución Mexicana y se denomina “época de oro”, por la belleza de las tarjetas postales, en que enviadas a todo el mundo alcanzaron centenas de millones.
Las postales de Saltillo al universo es una memoria visual que permite conocer el estatus de vida de entonces que los viajeros dejaron en sus textos, por ejemplo la arquitectura, su clima excepcional, la belleza de sus montañas y la calidez de la gente de nuestra ciudad. En términos generales muestra la modernidad de entonces en la capital de Coahuila.
Con este hermoso documento, Carlos Recio Dávila evitó que los agujeros del tiempo se llevaran estas imágenes de aquellos años.