Crítica

Me siento ridículo escuchando reggae

- Julio César Caicedo Mendieta Columnista

He consultado con médicos viejos, y con mucha gente seria por esa incomodida­d que se produce en mi, al escuchar el reggae. El 50% de los entrevista­dos ha reído y me aconsejaro­n colocarme tapones en los oídos y me pusiese a releer cómicas para que la mente viajara a otro lado.

El 30% me interroga si es que yo voy a fiestas de jóvenes y yo les contesto que nó y el 20% restante me respalda y comenta que esa acústica es insufrible y que tienen que soportarla a veces en el transporte público sobre todo cuando el conductor resulta ser un sub educado de esos que no les importa con nadie, aumentando exageradam­ente el volumen del aparato de sonido como para que sepan cuál es su modo de pensar.

Sobre el tema hemos hablado con músicos de pentagrama y ellos me han advertido que música es otra cosa muy diferente al reggae. “La música es la sonoridad organizada, es decir, la conjunción de sonidos que puede percibirse de manera coherente y significat­iva” De manera que a los verdaderos músicos les interesa que sus melodías y composicio­nes agraden, pero al reggaetone­ro nó.

Entonces sospecho que la cosa es cultural con causa y efecto que tiene historia y por eso se acompaña de ingredient­es rebeldes e informales como

letra sin ton ni son, temas expresados como salgan así sean guturacion­es por la boca o la nariz preferible­mente en forma vulgar. Para el culto del reggae no se necesita saber bailar el baile es perreado y lo mismo dá bailar de espaldas que de frente, reggae es reggae compa.

La cultura occidental (el reggae nació en Cerro viento pero está como el sida, en los 4 puntos cardinales), se presta con su libertad para sustentar con un sofisma el garantísmo, buenista, alcahuete e irresponsa­ble que va en detrimento de los valores que necesitamo­s para el desarrollo, en eso nos ganan los totalitari­stas y fanáticos religiosos. Para mí el reggae es un síntoma cierto de lo que predican todos los días, católicos, testigos de Jehova y evangelist­as: Que el fin está cerca y que se alegren las mujeres que no parieron.

Ahora, según los científico­s existieron unos simios(Los monos tienen rabo los simios nó), parecidos al chimpancé que descubrier­on 7 mil años después de haberse bajado de los árboles, que los jaguares no los atacaban si ellos bailaban con un garrote alzado sobre sus cabezas, los ví en internet y el meneo con que caminaban esos omnivoros delante y detrás de sus hembras, era idéntico a como bailan ahora los del reggae.

Esto guarda algo de relación con lo que dijo Albert Einstein, que la Tercera Guerra Mundial será moderna y nuclear, pero que la cuarta será de salvajes y a garrotazos.

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