El quinto poder
Si bien es cierto que los medios tradicionales de comunicación social como la prensa escrita, radio y televisión, eran considerados en el siglo XX como el Cuarto poder del Estado, por su nivel de influencia en la opinión pública, ahora han surgido las redes sociales y los blogs que, para muchos estudiosos de la comunicación, muy bien se le podría denominar el Quinto poder por su accesibilidad, efectividad y las oportunidades de interacción inmediata que ofrecen al público.
Estamos experimentando cambios trascendentales en la forma de cómo nos comunicamos y es algo que se nota a simple vista, nada más hay que analizar las diferentes campañas electorales que se han desarrollado últimamente en Panamá, y apreciaremos un gran despliegue de propaganda por las redes sociales, ya sea a favor o en contra de un candidato o grupo determinado.
Así como el empleo de las redes sociales tiene sus ventajas, también constituyen el escenario ideal para cometer todo tipo de actividades ilícitas como fraude, sobornos, engaños y otros delitos; además, por sus características de uso masivo y anónimo, sin restricciones legales, se convierten en vía para que circulen todo tipo de informaciones, bien o mal intencionadas, como son los bulos o noticias falsas que se difunden, con el fin de perjudicar a alguien.
Es evidente el papel que desempeñan las redes sociales en la lucha contra la corrupción porque debido a ellas, la ciudadanía se ha enterado del mal uso y, en variadas ocasiones, robo descarado de los bienes del Estado.