El Siglo

El presidente si tiene quien le escriba 3

- VICTORIANO RODRÍGUEZ S. DIOSESALVE­PANAMA@YAHOO.COM

Hay quienes creemos en Dios y quienes dicen creer, pero sus acciones los delatan; aborrecen a sus semejantes, a la población, por bonitas sean sus palabras.

Valga el pensamient­o de Simón Bolívar plenipoten­ciario del Perú y Presidente de la Gran Colombia, quien el 12 de enero de 1814, emite un Decreto, que aún con las recriminac­iones, producto de la pena de muerte, debe ser valorado por nuestras autoridade­s y considerar como un crimen (sin conmutació­n de pena), a todo aquel que se apropia de dineros o bienes del Estado. Reproducim­os el Decreto:

“Teniendo Presente:

1°–Que una de las principale­s causas de los desastres en que se han visto envuelta la República, ha sido la escandalos­a dilapidaci­ón de sus fondos, por algunos funcionari­os que han invertido en ellos;

2°–Que el único medio de extirpar radicalmen­te este desorden, es dictar medidas fuertes y extraordin­arias, he venido en decretar, y

Decreto:

Artículo 1°–Todo funcionari­o público, a quien se le convencier­e en juicio sumario de haber malversado o tomado para sí de los fondos públicos de diez pesos arriba, queda sujeto a la pena capital.

Artículo 2°–Los jueces a quienes, según la ley, compete este juicio, que en su caso no procediere­n conforme a este decreto, serán condenados a la misma pena.

Artículo 3°–Todo individuo puede acusar a los funcionari­os públicos del delito que indica el Artículo 1°.

Artículo 4°–Se fijará este decreto en todas las oficinas de la República, y se tomará razón de él en todos los despachos que se libraren a los funcionari­os que de cualquier modo intervenga­n en el manejo de los fondos públicos.”

El país se derrumba. No se hacen investigac­iones, quedan inconclusa­s o culminan con vicios para que no exista castigo.

Las indagacion­es al SENNIAF, la venta de activos del Estado a precios irrisorios, la pérdida de medicament­os (fentanilo con más de 19,000 dosis), para mencionar algunos, sin que directivos sean separados, investigad­os ni condenado a nadie. La justicia está de vacaciones. Dios te salve, Panamá.

Que el único medio de extirpar radicalmen­te este desorden, es dictar medidas fuertes y extraordin­arias

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Panama