La multimillonaria campaña de Biden y Trump
Los candidatos a la Casa Blanca han recolectado más de $3 mil millones. Shelia Krumholz, administradora principal del Center for Responsive Politics, explica cómo funcionan las donaciones de campaña
La lucha por llegar a la Casa Blanca está íntimamente ligada al financiamiento de la campaña y la capacidad de cada candidato en invertir el dinero de la forma más eficiente para hacer llegar su mensaje al electorado. Esto aplica no solo a la posición de la presidencia, sino también a las candidaturas para senadores o la casa de representantes en Estados Unidos.
Tan solo a un mes y días de que se celebren las elecciones en Estados Unidos, los candidatos presidenciales Joe Biden y Donald Trump han recaudado, entre ambos, $3,159.6 millones, según el portal Opensecrets.org, cuya directora, Sheila Krumholz, ofreció una charla en la reunión informativa virtual oficial del Centro de Prensa Extranjera de Washington, en la que participa La Estrella de Panamá.
El comité de campaña de Biden ha recolectado $702,341,647, de esta suma, $531,009,149 provienen de los fondos que recoge el comité de campaña, mientras que $171,332,498 proceden de fuentes externas.
El comité de campaña de Trump, por su parte, levantó $476,324,349, pero también recibieron fondos externos por un total de $118,394,412.
No obstante, además de los comités de campaña, grupos simpatizantes de los aspirantes están dedicados a reunir fondos. En el caso de Trump, America First Action sumó $82,947,180. Y en el lado de Biden, Priorities USA Action engrosó los números con $66,646,492.
Ambos, casi parejos en cuanto a cifra de financiamiento, se asesoran de firmas especializadas para invertir principalmente en medios digitales, los que inundan de mensajes al electorado.
En Estados Unidos prácticamente no hay límite para las donaciones independientes, o personas que están detrás de los candidatos casi invisibles; no obstante, requiere que las personas que hacen gastos independientes rindan informes donde divulguen tanto la cantidad del gasto, como el origen de los fondos que utilizaron.
En este sentido, las contribuciones externas de Biden ascienden a más de $171 millones, mientras que las de Trump superan los $237 millones.
La campaña presidencial moderna no es una sola organización. “Una vez que un candidato declara que se está postulando, siempre hay un comité de campaña oficial. Además, los PAC de liderazgo permiten que los aspirantes a presidente hagan donaciones a aliados políticos potenciales”, explica Krumholz.
La gran cantidad de dinero está en los llamados súper PAC (comité de acción política) y otros grupos externos, no solo el candidato, que puede solicitar donaciones ilimitadas y luego usar los fondos para golpear a los rivales y, como parece estar sucediendo en este ciclo, asumir algunas de las tareas que tradicionalmente se manejan por una campaña. Además, se han formado super PAC con el único propósito de atacar a un solo candidato. Los grupos externos no pueden coordinarse con las campañas, pero a menudo están dirigidos por amigos y exempleados, incluso miembros de la familia del candidato.
Krumholz es administradora principal del Center for Responsive Politics (CRP) y su portavoz principal. Se convirtió en directora ejecutiva en 2006, después de haber pasado ocho años como directora de investigación del centro, supervisando el análisis de datos para los clientes de Opensecrets.org y CRP.
En Estados Unidos prácticamente no hay límite para las donaciones independientes, o personas que están detrás de los candidatos casi invisibles; no obstante, requiere que las personas que hacen gastos independientes rindan informes”.