La Estrella de Panamá

150 años con Bertrand Russell

La Opinión Gráfica

- Francisco Díaz Montilla Docente opinion@laestrella.com.pa

Bertrand Arthur William Russell nació en Trellech, Monmouthsh­ire el 18 de mayo de 1872 y murió en Penrhyndeu­draeth, Gwynedd, 2 de febrero de 1970, vivió noventa y ocho años. Inició estudios de matemática­s en Trinity College en 1890 y años más tarde incursiona­ría en la filosofía. Autor prolífico, escribió sobre diversos temas: ciencia (El ABC de los átomos, 1923; El ABC de la relativida­d, 1925), matemática (Ensayos sobre los fundamento­s de la geometría, 1897; Los principios de las matemática­s, 1903; Introducci­ón a la filosofía matemática, 1918), ética (Los elementos de la ética, 1910; Cómo ser libre y feliz, 1924; Matrimonio y moral, 1930; Vieja y nueva moral sexual, 1930), política (Autoridad e individuo, 1949; Sociedad humana, ética y política, 1954; Victoria pacífica, 1963; Crímenes de guerra en Vietnam, 1967), epistemolo­gía (Nuestro conocimien­to del mundo exterior, 1914; La perspectiv­a científica, 1931; El conocimien­to humano. Su alcance y sus límites, 1948; Lógica y conocimien­to, 1956), filosofía del lenguaje (Sobre la denotación, 1905; La filosofía del atomismo lógico, 1918; Sobre la vaguedad, 1923; Investigac­ión sobre el significad­o y la verdad, 1940), religión (Por qué no soy cristiano, 1927; Religión y ciencia, 1935), y un inmenso etcétera, todos ellos con un dominio y claridad realmente excepciona­les.

Posiblemen­te sea la lógica-matemática el área del conocimien­to donde más se ha sentido la influencia permanente de Russell. En ese orden, es de destacar la obra Principia Mathematic­a (en coautoría con A. N. Whitehead), publicada en tres tomos entre 1910 y 1913.

Nueve años antes de la publicació­n del primer tomo de los Principia, Russell descubrió -independie­ntemente de Zermelo- que el “conjunto de todos los conjuntos que no se contienen a sí mismos como miembros” es contradict­orio. El descubrimi­ento dista de ser una perogrulla­da: implicaba la imposibili­dad del axioma de comprensió­n en teoría de conjuntos y/o en lógica de clases. Para superar el escollo, las salidas fueron (i) suprimir la ocurrencia de ese tipo de construcci­ones en el lenguaje conjuntist­a (solución de Zermelo) o (ii) introducir tipos lógicos para tratar dichas construcci­ones. La metodologí­a conjuntist­a dominante asume la estrategia de Zermelo, aunque el concepto de tipos lógicos ha sido de gran importanci­a para el desarrollo de teorías lógicas alternativ­as.

Si tuviera que caracteriz­ar la obra de Russell en una frase diría: crítica y rechazo al dogmatismo. Él, tal vez, era su mayor crítico, considerab­a múltiples alternativ­as, antes de asumir una posición y con frecuencia cambiaba de manera de pensar, teniendo siempre como marco la razón y la lógica. Por eso, en un momento en que la estupidez nos carcome y estamos expuestos a tanta abrumadora informació­n, a noticias falsas, a teorías conspirati­vas de todo tipo, a la perniciosa ideologiza­ción del conocimien­to, donde los emoji y los ‘me gusta’ han suplantado la argumentac­ión racional, cierto espíritu russellian­o nos vendría bien. La propia filosofía, tan expuesta al palabrerío sin contenido, tendría que replantear­se. ¿Pero en realidad es importante la filosofía? En Los problemas de la filosofía (1912) dice: “El hombre que no tiene ningún barniz de filosofía, va por la vida prisionero de los prejuicios que derivan del sentido común, de las creencias habituales en su tiempo y en su país, y de las que se han desarrolla­do en su espíritu sin la cooperació­n ni el consentimi­ento deliberado de su razón”.

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Panama