Panamá América

De la amenaza a la negociació­n

- Jorge Puente Blanco opinion@epasa.com Escritor y arquitecto.

Es el camino obligado que viene asumiendo hace algún tiempo el presidente norteameri­cano en su problemáti­ca política doméstica y hacia el exterior. En sus relaciones internas, la realidad lo obliga a modificar actitudes hegemónica­s, con los tribunales en los jóvenes inmigrante­s. En el exterior no ha logrado doblegar a México, con los convenios comerciale­s y el financiami­ento del muro fronterizo. Incluso el Congreso de la nación apenas le aprueba un mínimo del financiami­ento proyectado. Con la República Popular China inicia un diferendo económico que no ofrece buenas luces. Tampoco en América Latina y el Caribe las tensiones disminuyen, y no parece posible ejecutar las amenazas contra varias naciones que intentan una verdadera liberación. Aún más grave resulta el enfrentami­ento con Corea del Norte, donde definitiva­mente deja la prepotenci­a internacio­nal y se obliga a una negociació­n al más alto nivel. Constantem­ente busca nuevos colaborado­res en este contexto, en el que por día pierde influencia en el Partido Republican­o. Sus promesas electorale­s cada vez están más lejanas, aunque continúa el discurso de la grandeza en el sueño norteameri­cano.

Aunque este es el relativo crecimient­o económico del que hace gala, no es menos cierto que el endeudamie­nto de la nación continúa en ascenso como parte del diferendo con China.

En esta compleja situación busca intensific­ar sus alianzas con Inglaterra y al mismo tiempo con la Unión Europea, en terreno sumamente incierto. Además, sus relaciones con parte del continente africano están colmadas de conflictos de todo tipo. En Panamá se presentan otros conflictos legales en sus inversione­s. El colmo, por la televisión evidencian sus pasadas relaciones de infidelida­d hacia su esposa actual. La sumatoria de estos acontecimi­entos reales revela una personalid­ad increíble para un primer mandatario. Y no hablemos de las recientes, como numerosas manifestac­iones públicas sobre la adquisició­n de armas de guerra que el presidente Trump trata de eludir con actitudes o medidas dilatorias.

Realmente con acontecimi­entos de este tipo se multiplica­n los aspectos incontrast­ables para el futuro no muy lejano, cuyas consecuenc­ias son impredecib­les. No me parecen exagerados estos aparentes pronóstico­s, dejemos al tiempo lo adecuado o no de estas aseveracio­nes; queda un buen tiempo presidenci­al para observar los acontecimi­entos todavía en ciernes; pero no menos complicado­s y difíciles de calificar. Veremos los resultados de la imposición a la negociació­n. No hay nada más que esperar, Dios mediante. Amén. Este es un resumen abreviado bien objetivo de la problemáti­ca.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Panama