Estrés acústico
“descubrir” de qué se trata con el consecuente daño que les podría ocasionar. No obstante, la mayoría de los animales domésticos estaban apabullados.
Hacía un tiempo ya que no veíamos casos de niños que se revientan las manos manipulando inadecuadamente petardos ante la reverenda irresponsabilidad de los adultos. Sin embargo, esta vez, el Centro de Emergencias Médicas reportó 6 niños –a uno de ellos debieron amputarle los dedos– y dos adultos que en la Nochebuena resultaron heridos con las famosas bombas.
Definitivamente, el efecto de la petardeada es dañina para humanos y animales. Esta Navidad ha sido prolífica en bombas de artificio, y parecía excesiva en comparación con las anteriores. ¡Qué manera de encender y malgastar el dinero!
Las fiestas de fin de año requieren colorido, glamour, alegría y hay que celebrar. Al fin y al cabo, los 365 días pasan volando y uno celebra los logros, los buenos augurios, los planes, los proyectos, la reunión de las familias, el reencuentro de amigos.
Habría que ir replanteando esto de lanzar bombas, bombitas y bolas de mengano o zutano, a tutiplén y al santo cohete.
El Dr. José Mayáns advierte que los petardos causan un tremendo daño a los animales. En tanto, en las redes sociales, Nicolás Latourrette Bó encabezó una campaña para que la fiesta no se convierta en un infierno para los animales.
“Los perros no entienden lo que pasa cuando comienzan los estruendos de las bombas. Tienen ansiedad, miedo, angustia, pánico. Aumenta su frecuencia cardiaca, jadean, aumentan la salivación, los temblores, las sacudidas y las náuseas. Intentan escapar a cualquier parte. Procuran esconderse donde sea, se vuelven agresivos, inclusive con sus dueños, pueden morder a cualquiera que intente ayudarlos”, dice Mayáns.
Pero el problema no es solo en Paraguay, sino mundial. Estos días trascendió que la solución que encontraron en un pequeño pueblo italiano es la de utilizar fuegos artificiales sin ruidos.
El objetivo es evitar el “estrés acústico” que les produce a los animales las detonaciones. Si va a explotar bombas sin parar, por lo menos acuérdese de que la mitad de ese dinero lo puede donar a los damnificados o a los niños necesitados.