Ministro utilizó una reunión de líderes para alabar al Gobierno
El ministro de Hacienda, Santiago Peña, dio ayer un discurso más político que económico ante líderes de empresas internacionales aglutinados en la red global LIDE que se reunieron en el Sheraton Asunción Hotel. Peña no perdió la oportunidad para hablar d
El secretario de Estado dijo que hablaría sobre la fórmula que utilizó Paraguay para ser el país que tendrá mayor crecimiento económico en América Latina y el Caribe en este 2017, con una cifra del 6%. Pero en lugar de mencionar todo el proceso de consolidación macroeconómica que se ha venido registrando en las últimas décadas, como parte de la explicación principal del incremento del Producto Interno Bruto (PIB), se centró exclusivamente en el gobierno actual y, más particularmente, en la persona de Horacio Cartes.
Primero dijo que tres momentos en la historia de Paraguay son importantes mencionar, porque en ellos se generaron “puntos de inflexión”. Así, nombró el año 1811, “cuando Paraguay decide que quiere ser una nación independiente”; el año 1992, “cuando la sociedad en su conjunto nuevamente se agrupó y construyó una visión común, porque fue el año donde se promulgó la Carta Magna que tenemos”; y finalmente “hoy, porque yo creo que esto se inició en el año 2013”.
Según Peña, a partir de ese año, es decir, desde el inicio de este Gobierno, Paraguay empezó a reafirmar su “compromiso de ser una nación democrática”. Eso, olvidando el intento del propio Presidente Cartes de violar la Constitución Nacional y el atropello al Congreso, que solo se impidió gracias a la movilización ciudadana y el rechazo generalizado de los sectores económicos.
Obviando mencionar ese tipo de acciones específicas, el ministro dijo que “con la venida del presidente Horacio Cartes, que hoy yo creo que se ha ganado un espacio en la historia del Paraguay como un elemento disruptivo en la historia de este país, no solamente en lo económico, sino en lo político y en lo social, se empiezan a generar cambios muy importantes, donde el Presidente viene con una visión renovadora, una visión mucho más moderna de la construcción de un Estado”.
El discurso continuó con una mención al Plan Nacional de Desarrollo Paraguay 2030, en cuyo marco “2.000 líderes de la sociedad civil de todos los sectores del Paraguay se reúnen a construir esta visión que se termina de consolidar en diciembre de 2014, y que ha sido el eje de la gestión de gobierno en los últimos años”. El secretario de Estado no dio cifras específicas de reducción de pobreza (de hecho, en este Gobierno ha aumentado la pobreza extrema, según las cifras oficiales), tampoco del nivel de desempleo o subempleo y menos aún de los índices de acceso a la educación primaria, secundaria y universitaria. Apenas se limitó a decir que esta visión al 2030 se basa en tres ejes: La reducción de la pobreza, el desarrollo económico inclusivo y la inserción de Paraguay en el mundo.