Capitalidad de Jesuralén moviliza la calle y diplomacia
La decisión del presidente estadounidense, Donald Trump, de reconocer oficialmente a Jerusalén como capital de Israel seguía centrando la actualidad diplomática, desde la Unión Europea a Egipto, pasando por Turquía y Rusia. Naciones Unidas considera que e
JERUSALÉN (AFP, EFE). El reconocimiento de Estados Unidos, el 6 de diciembre pasado, de Jerusalén como capital de Israel genera manifestaciones diarias en el mundo musulmán y disturbios en los Territorios Palestinos.
Esta decisión, que incluye también trasladar la embajada de Tel Aviv a Jerusalén, convierte también a EE.UU. en el único país del mundo que reconoce la capitalidad de Jerusalén, donde ninguna nación tiene su sede diplomática debido a que, tras la anexión israelí de la parte oriental de la ciudad en 1980 –tras haberla ocupado durante la Guerra de los Seis Días, de 1967–, Naciones Unidas pidió a la comunidad internacional que retiraran sus representaciones de allí.
La creación de un Estado palestino que coexista en paz con Israel es la solución de referencia internacional, por lo que países miembros de la ONU instaron a las autoridades palestinas e israelíes a retomar las negociaciones suspendidas hace años.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, y de Turquía, Recep Erdogan, expresaron su oposición a la decisión de Trump.
Para la Unión Europea la solución del antiguo conflicto pasa por la creación de dos Estados sobre la base de las fronteras de 1967, cuyas capitales en ambos casos estarían en Jerusalén, por lo que rechazó la sugerencia del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, de trasladar sus embajadas a Jerusalén y reconocer la capitalidad, como hizo EE.UU. “Del lado de la UE y sus miembros, esta decisión no llegará”, dijo la alta representante del bloque, Federica Mogherini.
El jefe del Hezbolá libanés, Hasan Nasralá, llamó a una manifestación masiva en Beirut, feudo del poderoso movimiento chiita, enemigo acérrimo de Israel y que se proclama como uno de los grandes defensores de la causa palestina.
Los israelitas (mayoritariamente judíos) consideran que Jerusalén es su capital desde hace más de 3.000 años, por razones religiosas y políticas. La Ciudad Santa era la capital del reino de Israel del rey David (siglo X antes de Cristo) y más tarde del reino judío asmoneo (siglo II antes de Cristo).
Los palestinos (mayoritariamente islámicos), que representan alrededor de un tercio de la población de la ciudad, reivindican Jerusalén como capital de su futuro Estado.
Para ellos, la ciudad también tiene un estatuto religioso esencial: la Explanada de las Mezquitas, lugar desde donde –según el islam– el profeta Mahoma ascendió al cielo, es el tercer sitio santo para los musulmanes.