“Se deben examinar alternativas”
Laura Arias estuvo durante 10 años metida en el mundo de las ventas para distintas empresas telefónicas y el área de servicios. Se convirtió en mamá estando en el segundo año de la media. Al separarse del papá de su hijo vio la manera de dedicarle el mayor de los tiempos a su hijo, situación que se volvió casi imposible porque las ventas le absorbían casi todo el día. Asimismo, vivió malas experiencias con niñeras. “Nunca será igual que le cuide otra persona a tu hijo y por más que le pagues bien y le pongan un seguro social, tarde o temprano se van y cuando más la necesitas”, expresó Laura, al añadir que una de sus niñeras le dejó plantada justamente un lunes en que tenía que presentar un trabajo a una gran empresa. “No tuve opción y llevé a mi hijo”, contó.
Con el correr de los años se dio cuenta de que cada vez veía menos a su hijo Sebastián. “Estudiaba y trabajaba. Cuando salía para el trabajo mi hijo todavía estaba durmiendo, y cuando volvía era la misma cosa. Me dolía en el alma porque ya no escuchaba que me diga mamá”, alegó.
Añadió que llegó a ingresar a la Universidad Nacional de Asunción, pero decidió dejar sus estudios para darle una mejor atención a su hijo. En el 2017 Sebastián (13) fue intervenido quirúrgicamente y por esta difícil situación Laura tuvo que vender su vehículo y otras herramientas de la casa. Esta vivencia hizo que decidiera renunciar a su empleo fijo.
Desde allí, se enfocó a cuidar a Sebastián y vio qué talleres rápidos podía hacer para generar ingresos. Fue entonces que ahondó sobre las manualidades con productos reciclados, primero a través de internet y luego se inscribió en un curso del Servicio Nacional de Promoción Profesional (SNPP), que sigue hasta hoy, lanzando con base en esto su emprendimiento “Ñandu Paraguay”, que fabrica y comercializa puf a partir de cubiertas recicladas. Hoy, con muchos pedidos a mano y una cartera de clientes formada, Laura sale adelante con su hijo, que le ayuda a hacer sus artículos. “Renuncié a viajes, a propuestas, pero no me arrepiento. Por los hijos todo es posible, hay que buscar alternativas”, expresó.