Ineficientes
Los “grandes líderes” políticos del departamento de Caaguazú nunca aportaron mucho para esta zona del país. El sistema judicial está cada vez más podrido, los buenos servicios de educación y salud parecieran estar prohibidos para la gente de escasos recursos económicos.
Los hospitales están abarrotados, no hay medicamentos y recursos humanos suficientes para poder paliar la alta demanda. El personal de blanco debe hacer magia para ubicar a los enfermos para que sean atendidos en algún momento.
Empezando con el sistema judicial de Coronel Oviedo y Caaguazú es lamentable la forma que se manejan los fiscales y los jueces que son los responsables de “impartir justicia”. Todo se maneja a nivel de “amiguismo” y los casos más renombrados que salieron a luz que involucran a referentes políticos de la zona quedaron en el “oparei”.
En Coronel Oviedo la justicia está en manos de los colorados, el senador y actual presidente del Congreso Nacional Silvio “Beto” Ovelar y el ex diputado Mario Soto Estigarribia, aunque este último perdió mucho poder. Ya en un punto más alejado, se encuentra el diputado Antonio Buzarquis y otros referentes de la carpa azul.
En Caaguazú, la justicia estaría siendo dominada por el “Clan Ledesma”, liderado por el diputado Miguel Angel Del Puerto (ANR) y su suegro, el operador político Emilio Ledesma.
Las denuncias de “cocinadas de casos” que apuntan a estos referentes siempre terminan en la nada.
Ninguna de las autoridades mencionadas anteriormente han hecho algo para que los servicios de educación y salud tengan impacto positivo en el departamento.
Muchas de las escuelas se caen a pedazos, las sillas que utilizan los alumnos están rotas o simplemente no existen. La distribución de almuerzo y merienda escolares son distribuidos por los “amigos” de las autoridades de turno; nadie controla la calidad y la cantidad.
Para colmo, en el departamento de Caaguazú varias autoridades están cumpliendo su segundo periodo en el cargo, pese que no generaron beneficios para la comunidad.