Jueza solicitó audiencia

La jueza penal de sentencia Nilda Giménez Bogarín solicitó al Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM) que fije fecha de audiencia pública para explicar el inconveniente ocurrido con sus colegas que impidió supuestamente el inicio de un juicio que luego derivó en una suspensión preventiva en sus funciones por parte de la Corte Suprema, que tomó la determinación con base en un informe de un acta que habría sido falseado por el auditor del Poder Judicial, Roberto Ortiz.

Giménez Bogarín explicó que el 28 de agosto pasado debió integrar junto a sus colegas Mesalina Fernández (presidenta del colegiado) y Gloria Hermosa (miembro titular) el tribunal de sentencia que debía llevar adelante el juicio oral caratulado “Alipio Sanabria s/ maltrato a menores”, fijado para las 8:30, en la Sala 9 de tribunales.

Sin embargo, en esa misma sala se iba a realizar con antelación el juicio oral caratulado “Erario Uzaín s/ apropiación”, fijado para las 8:00. Este último juicio, que tenía como miembros del tribunal de sentencia a las juezas Rossana Maldonado, Fernández y Alba González, no se inició porque se produjo un altercado entre los abogados José Domingo Almada y Rubén Mazier que, según las filmaciones de circuito cerrado de tribunales, se extendió hasta las 8:39.

En su acta el funcionario de auditoría Ortiz habría faltado a la verdad al hacer constar que las juezas Fernández y González ya estaban esperando a la jueza Giménez desde las 8:30 para el inicio del juicio sobre maltrato a menores.

Otra irregularidad detectada es que González no era parte del tribunal titular, ya que era la suplente. La titular del caso de maltrato era la jueza Gloria Hermosa, según el sorteo del tribunal.