Gente mayor y ciclistas son los adelantados en la peregrinación
Miles de fieles de la Virgen de Caacupé se llegaron ayer a la Capital Espiritual para pagar sus promesas. En su gran mayoría son adultos mayores, ciclistas y estudiantes.
Juana Antonia Garay (76) camina con dificultad hacia la Basílica. Con ayuda de su hija y un nieto baja desde Kurusu Peregrino. “Me adelanté porque en su víspera hay mucha gente y yo camino muy lento. Para mí es mejor venir a pagar mi promesa ahora que no hay tanto movimiento”, comentó.
Como Antonia, varios adultos mayores cumplen antes de fecha su compromiso con la Virgencita Azul. “Vengo desde J. Augusto Saldívar a dar gracias por mi salud y para que el próximo año siga sana y haya prosperidad en mi familia”, señaló.
Sanada del corazón
Cecilia Sanabria (65), horqueteña, es otra devota que se anticipó al Día de la Virgen. “Mi hijo ya me trajo porque el sábado es más difícil venir. Estoy muy contenta porque ya vine a cumplir con mi visita a nuestra Santa Patrona. Le vine a dar las gracias porque me sanó de una dolencia del corazón y para que siga protegiendo a mis siete hijos (cuatro varones y tres mujeres) y que nunca les falte trabajo”, dijo emocionada.
Señaló que cada diciembre viene desde Horqueta y se instala en la casa de una de sus hijas en Ypané, para luego visitar a la Virgen. “Ahora ya vuelvo tranquila a mi pueblo”, manifestó.
Casi 600 Km en bici
Los ciclistas también están entre los adelantados en Caacupé. Uno de los grupos llegó desde Concepción en la mañana de ayer. “Somos 14 en el equipo y este año fue muy sacrificado porque vinimos por el Chaco y el camino era horrible. Fundimos muchas cubiertas”, dijo Lucio Recalde, quien comentó que hace más de 10 años hace la travesía en honor a la Virgen de los Milagros.
El norteño destacó que salieron el 2 de diciembre y que hoy retornarán en bus a Concepción. “Somos uno de los 8 grupos de ciclistas que vienen desde el Primer Departamento. Venir tiene su costo, unos G. 500.000 por cabeza, porque se deben pagar comida, uniforme y el combustible de la camioneta de apoyo. Lo que es el arreglo de nuestras bicicletas ante eventuales inconvenientes corre por nuestra cuenta”, dijo Recalde.
Dar gracias por pasar de grado
Varios estudiantes también se anticiparon a la fecha, la mayoría para dar gracias por culminar con éxito sus cursos. Uno de ellos es Diego Bogado (14), quien peregrinó desde Cnel. Oviedo hasta la Capital Espiritual, más de 70 km. El joven vino con su tío Silvio Penayo y Antonio Acosta. Los tres caminaron 23 horas para pagar sus promesas.