Papo Morales se expone por primera vez a una sentencia de hasta 25 años
Gregorio “Papo” Morales, actualmente preso en la cárcel de Villarrica y quien ya cumplió condenas por estafas, se expone por primera vez a una pena de al menos 25 años, por el intento de asesinato con un fusil de guerra de un peón de la estancia de su mad
Gregorio Ramón Morales Macchi, de 42 años de edad, nacido el 18 de diciembre de 1976 y más conocido como Papo Morales, en su juventud fue un activo miembro de la farándula asuncena, pero a la par empezó a ser conocido en el ambiente delictivo, cuando aparecieron sus primeras causas por estafas y adulteración de cheques.
El 10 de diciembre de 2001 fue arrestado luego de intentar comprar en Asunción tres computadoras con un cheque de Citibank adulterado. Fue imputado por la fiscala Liliana Alcaraz, pero liberado por el juez Agustín Lovera Cañete.
El 18 de diciembre de 2003, Gregorio Morales y un tal Nery Rupert Britos Meza fueron detenidos cerca de un shopping de la capital luego de que uno de ellos fuera “confundido” con un estafador. Años después, Britos acumularía más de una decena de antecedentes, justamente por estafas.
En noviembre de 2004, Papo Morales fue recapturado ya en carácter de líder de una red de “microcirugía” de cheques, modalidad mediante la cual intentaron cobrar G. 380 millones de la cuenta de la entonces Visión de Finanzas con la adulteración de un cheque del Banco Nacional de Fomento (BNF). Fue procesado por la fiscala Carla Rossana Rojas, pero liberado por la jueza Blanca Gorostiaga.
El 1 de abril 2005, Morales Macchi se presentó para una audiencia indagatoria ante la fiscala Teresa Martínez, en el marco de una investigación por producción de documentos no auténticos.
Caso ABN Amro Bank
Papo Morales consolidó su fama a partir del descubrimiento de un túnel de 150 metros que llegaba a la bóveda de la sucursal del ABN Amro Bank del barrio Villa Morra de Asunción. El robo fue abortado el 22 e febrero de 2006. Según el cuidador de la casa, Morales estuvo varias veces en el lugar mientras se cavaba el túnel.
El 12 de abril de 2006, Papo Morales fue enviado a Tacumbú por orden del juez Roberto Martínez. La fiscala de la causa, Teresa Sosa, lo imputó por varios hechos punibles e incluso lo acusó de ser el verdadero ideólogo del robo.
Sin embargo, tres meses después la misma fiscala Teresa Sosa cambió drásticamente de postura con relación a Papo Morales y facilitó, primero su prisión domiciliaria, y luego la libertad ambulatoria. A partir de entonces comenzaron a surgir rumores sobre un supuesto relacionamiento sentimental entre la fiscala Sosa y su procesado Morales, hasta que, en diciembre de 2006, la propia agente del Ministerio Público solicitó la suspensión condicional del procedimiento a favor de Papo Morales y del amigo de este, Vicente Castiñeira, quien era otro de los imputados.