Reglas para compra se mantienen invariables
El impasse generado por la falta de acuerdo entre Eletrobras y ANDE, sobre la contratación de potencias de Itaipú para este año ha quedado en un cuarto intermedio, pero las reglas del juego para la ANDE se mantienen invariables, confirmó ayer el gerente Técnico del ente eléctrico estatal, Ing. Fabián Cáceres.
El funcionario señaló que mientras se sigue dialogando con Eletrobras, “en base al respeto de los intereses de ambas instituciones, no se modifica ninguna condición anteriormente acordada”. Explicó que esto implica que nuestro país seguirá accediendo a la “energía no garantizada”, o adicional a la garantizada, conocida también como excedente, y que es más barata.
Añadió que entiende que un acuerdo con Eletrobras también debe ser tratado a nivel del Consejo de Itaipú, y como recién anteayer asumió el nuevo director general brasileño, el tratamiento depende de esa reunión, que estaba previsto esta semana. “No obstante, el ‘status quo’ continúa igual, sin ningún perjuicio para la ANDE. Mantenemos un ‘diálogo fluido y permanente’ con nuestros pares de Eletrobras, cuidando los intereses de cada contratante, y en nuestro caso, los intereses nacionales también”, enfatizó.
Cabe recordar que el presidente de la ANDE, en una declaración a nuestro diario, había alertado que a falta de acuerdo entre ANDE y Eletrobras, para la contratación de potencias de Itaipú para el 2019, se debe a que los representantes del Brasil pretenden que Paraguay deje de contratar la energía excedente y, de paso, desconocer acuerdos suscritos sobre este particular, entre ambos países.
Comentó que los técnicos y autoridades de Eletrobras quieren volver a estudiar y establecer una “modalidad de contratación diferente”, aún cuando el compromiso, firmado por los presidentes Luis Inacio Lula Da Silva y Nicanor Duarte Frutos (2006) tiene vigencia hasta el año 2023.
El titular de la ANDE, había afirmado igualmente que la institución a su cargo cree que se puede ir pensando en lo que vaya a pasar después del año 2023 (en que el Tratado de Itaipú podrá ser revisado); pero que lo que está acordado debiera de ser respetado.