Pueblo de Hong Kong se manifiesta pese a prohibición policial
HONG KONG (AFP, EFE). El centro de Hong Kong volvió a sumirse en el caos ayer, con violentos enfrentamientos entre la policía y manifestantes, que desafiaron la prohibición policial de movilizarse e invadieron de nuevo las calles de la excolonia británica.
Pero decenas de miles de manifestantes vestidos de negro –color emblemático de la protesta– desfilaron por la tarde por varios barrios del centro de la región semiautónoma.
“Recuperar Hong Kong, la revolución de nuestra época”, coreaban.
La movilización amplió sus reivindicaciones, denunciando la creciente influencia de la dictadura comunista de China Continental sobre su región y la pérdida de libertades, en este enclave de democracia liberal, del cual se retiró Gran Bretaña en 1999.
“Es ahora o nunca”, explica una contable que se hace llamar Wong. “Tengo dos hijos que no han venido, pero su abuela está aquí. Defendemos el mantenimiento del derecho a manifestar para la próxima generación”, agregó.
Ayer se cumplió el quinto aniversario del rechazo de Pekín a organizar elecciones con sufragio universal en Hong Kong. Esta decisión desencadenó el “Movimiento de los Paraguas” de 2014, marcado por 79 días de ocupación popular del centro financiero y político de la ciudad.
Aquella movilización histórica finalizó sin ninguna concesión por parte del régimen comunista chino. Pero los manifestantes actuales están decididos a no dejar morir su movimiento.
Además de la prohibición de manifestar, la víspera cinco militantes de primer orden y tres diputados fueron detenidos en una redada. Entre ellos, dos figuras centrales del “Movimiento de los Paraguas“: Joshua Wong y Agnes Chow, ambos de 22 años.
Más de 900 personas fueron detenidas en total desde junio.