La prioridad
Entró en debate asignarle nuevas funciones a las Fuerzas Armadas de la Nación, como la seguridad interna del país y combate al crimen organizado. Si se llegase a modificar la ley será en detrimento de la Policía Nacional, encargada de la seguridad ciudadana.
El argumento del presidente de la República, Mario Abdo, es darle un nuevo rol a las FF.AA., y superar el ocio. Pero, la Policía Nacional es una institución que pese a los errores, siempre cumplió la misión constitucional e incluso numerosos policías perdieron la vida en el cumplimiento del deber.
La Constitucional Nacional en su artículo 175 establece que la Policía Nacional es una institución profesional, no deliberante, obediente, organizada con carácter permanente y en dependencia jerárquica del Poder Ejecutivo, encargada de la seguridad interna de la Nación. Dentro de ese marco constitucional tiene la misión de preservar el orden público, así como los derechos y la seguridad de las personas y entidades y de sus bienes; ocuparse de la prevención de los delitos; ejecutar los mandatos de la autoridad competente y bajo dirección judicial investigar delitos.
Lo que el Poder Ejecutivo debe hacer, y lastimosamente no lo hace, es fortalecer a la Policía Nacional, brindarle mayor capacitación profesional; dotarle de logística, medios, equipos modernos de comunicación a fin de responder a las exigencias y combatir al crimen organizado, apoyado por un servicio de inteligencia.
Familiares denunciaron que la Policía no cuenta con chaleco anti balas, proyectiles ni armas en algunos casos. Estas condiciones difícilmente pueda combatir a los delincuentes.
Las FF.AA. tienen la misión constitucional de custodiar la integridad territorial y defender a las autoridades legalmente constituida. En vez de salir a las calles debería de reforzar el control en las fronteras y evitar que la soberanía nacional sea avasallada.
El fortalecimiento de la Policía Nacional debería ser la prioridad para el Poder Ejecutivo.