Petropar solicitó a Diputados ocho veces más dinero que el año pasado
Para este ejercicio fiscal Petropar requirió mucho más dinero para bonificaciones y gratificaciones que en el ejercicio anterior. Según los datos, en el 2018 consiguió un total de G. 3.583 millones, mientras que para este año la Cámara Baja aprobó nada menos que G. 28.073 millones.
Los pedidos de dinero de Petropar a la Administración Central para el rubro Personal, desde 2015 hasta 2019, muestran marcadas diferencias en los montos. El de este año supera a todos los aprobados anteriormente.
Documentos que obran en nuestro poder revelan que el año pasado la empresa estatal consiguió una reprogramación presupuestaria que le permitió distribuir a sus funcionarios G. 3.583 millones, mientras que en el ejercicio 2017 fue de apenas G. 2.222 millones.
El monto de G. 28.073 millones aprobado la semana pasada por la Cámara de Diputados es ocho más que la cifra aprobada para el ejercicio anterior.
En 2016 la petrolera del Estado también solicitó más fondos para gastos rígidos, y
fue en dos oportunidades. Le dieron alrededor de G. 10.000 millones (ver infografía).
En 2015 también consiguió G. 4.154 millones para sus funcionarios.
La administración actual, presidida por Patricia Samudio, pidió en junio al Ministerio de Hacienda una reprogramación presupuestaria. Fuentes de esta cartera de Estado revelaron que habían exigido la justificación del destino del dinero, pero que la estatal nunca respondió. Posteriormente se enteraron de que había recurrido a la Cámara Baja.
Las autoridades de Petropar negaron haberlo hecho. Dijeron que habían sido los sindicalistas quienes recurrieron al Congreso Nacional para solicitar la reprogramación presupuestaria.
En agosto último, Jasinto Prieto, director de gestión empresarial de Petropar, distribuyó una circular para informar a los funcionarios que no iban a pagar las bonificaciones y gratificaciones, porque no contaban con los recursos económicos. Advirtió además que a partir de setiembre no pagarían estos rubros si no conseguían la reprogramación presupuestaria.
Muchos pagos extras
En una entrevista concedida a nuestro diario, dicho director de gestión empresarial argumentó que las diferentes unidades de negocios de la compañía obligaron a gastar más plata, por lo que tuvieron que pedir que parte de los recursos destinados para impuestos y tasas sean redireccionados al rubro 100 “servicios personales”.
También dijo que en este ejercicio fiscal solo estarían utilizando G. 8.000 millones y los 20.000 millones restantes quedarían para “un colchón” del siguiente ejercicio fiscal, o sea para el 2020. Según la planilla de distribución de dinero aprobada por Diputados, a bonificaciones y gratificaciones irán alrededor de G. 8.200 millones.