Declaraciones del Presidente francés sobre la OTAN molestan a sus socios
El Presidente francés recibe hoy al secretario general de la OTAN, días después de haber afirmado que esa organización está en “muerte cerebral”, lo que causó molestia entre sus otros aliados.
PARÍS (AFP). El estilo y del presidente francés Emmanuel Macron, en ocasiones perentorio, impredecible y apresurado, ha causado molestias a sus pares en Europa.
Emmanuel Macron ya sorprendió varias veces a sus homólogos con sus declaraciones a contracorriente sobre el Brexit, los Balcanes –bloqueó la apertura de las negociaciones de adhesión de Macedonia del Norte a la UE– y con su llamado a un acercamiento con Rusia.
Sus virulentas declaraciones sobre la OTAN, denunciando la falta de coordinación entre Estados Unidos y sus aliados, y sobre la ofensiva de Turquía, miembro de la Alianza, contra los kurdos sirios, actores clave en la lucha contra el grupo Estado Islámico (EI), sembraron consternación.
Electrochoque
“Lo que suscita reacciones en Europa es el método y la forma”, dijo una fuente diplomática francesa. “Pero el electrochoque funcionó”, imponiendo un debate sobre la estrategia de la OTAN y el refuerzo de la defensa europea, añade.
Macron, sobre todo, exasperó
a los europeos al parecer dudar de la solidez del artículo 5 del Tratado Atlántico, que prevé una solidaridad militar entre los miembros de la Alianza si uno de ellos es atacado.
Este pacto, garantizado por Estados Unidos, fue la base de la seguridad en Europa durante la Guerra Fría y sigue siendo un gran baluarte ante los desafíos modernos, como el terrorismo internacional.
Respuesta de Merkel
La canciller alemana Angela Merkel defendió ayer a la OTAN, frente a las críticas de su colega francés, a una semana de la cumbre de la Alianza Atlántica en Londres, que se anuncia tensa.
La OTAN ha sido “un baluarte contra la guerra” que garantiza “la libertad y la paz” desde hace 70 años, en parte gracias a “nuestros amigos estadounidenses”, recordó en la Cámara de Diputados alemana.
La canciller consagró a la Alianza Atlántica la mayor parte de su discurso que estaba destinado a defender el presupuesto federal de 2020. Pero respondió punto por punto al presidente francés, que ve la OTAN en estado de
“muerte cerebral”.
Fundada en 1949, en pleno conflicto Este-Oeste, la OTAN ¿tiene alguna utilidad? Sí, respondió Merkel.
“Está en nuestro interés preservar la OTAN, más incluso que durante la Guerra Fría”, aseguró la canciller, que creció en la ex-RDA comunista.
Merkel recordó la contribución de la OTAN a la estabilización desde el fin de la Guerra Fría, de la situación en los Balcanes o en Afganistán.
“Europa no puede defenderse por sí sola por el momento, dependemos de la Alianza Atlántica, es importante que trabajemos para esta Alianza y asumamos más responsabilidades”, recordó Merkel.
París y Berlín ya han tratado de calmar los ánimos después de las críticas francesas, al acordar, el 20 de noviembre, establecer un comité de expertos destinado a reforzar el proceso político en el seno de la alianza más grande del mundo.