Tres años de intensa búsqueda
El comisario principal (R) Alfredo Cáceres, torturado en el cuartel de la Marina Paraguaya por el entonces ministro del Interior Walter Bower, busca actualmente a su hermano de 70 años, identificado como Maximino Cáceres González (foto), quien fue visto por última vez en la zona norte de la ciudad de Fernando de la Mora.
El comisario retirado, en comunicación con nuestro diario, explicó que su hermano se desempeñaba hasta el 2017 como taxista, pero que en ese tiempo ya no generaba tantos ingresos como en años anteriores. Incluso estaba aquejado por algunas deudas.
Cáceres relató además que el día de su desaparición, 22 de mayo de ese año, Maximino, por entonces de 67 años, habría mantenido una fuerte discusión con su esposa y sus dos hijos, en el interior de su vivienda situada sobre la calle Luis Alberto del Paraná de la zona norte de Fernando.
De ahí, Maximino salió muy enojado y se marchó sin llevar su cédula de identidad, su celular ni su taxi. Incluso amenazó con que se quitaría la vida.
El comisario añadió que al enterarse de esto insistió a su sobrino a que realice la denuncia, pero el joven no la hizo sino hasta recién el 30 de ese mes en la comisaría 2ª Central de Fernando de la Mora. Igualmente, el comisario efectuó la denuncia por desaparición que luego se informó a la Fiscalía.
Pero desde entonces nada se supo de Maximino.
Alfredo dijo que cada cierto tiempo sube a sus redes sociales una foto de su hermano para solicitar la ayuda a las personas de buen corazón que brinden datos si lo ven. También ratifica la denuncia en la comisaría.
Recordó en otro momento que el año pasado se halló el cuerpo de un hombre en Encarnación, con características similares a las de Maximino. Según el informe forense, esa persona llevaba unos dos años fallecida, que coincidía con la fecha de la desaparición.
Pero Cáceres fue hasta la Morgue Judicial donde tras el reconocimiento del cadáver y un paladar, marcas de cirugías y la vestimenta se descartó de que se tratase de su hermano.
Por ahora, la búsqueda continúa sin cansancio y con esperanzas.