Oscuro panorama se tiene en Pedro Juan Caballero
El presidente de la Cámara de Comercio de Pedro Juan Caballero, Víctor Barreto, señaló que el panorama económico a corto plazo en esta parte de la frontera es “sumamente preocupante”. Sostuvo que sin una ayuda importante del Gobierno central, la economía de la zona no podrá recuperarse.
PEDRO JUAN CABALLERO (Cándido Figueredo Ruiz, de nuestra redacción regional). Los comerciantes consultados por nuestro diario explican que cerca del 90% de la economía de esta capital departamental está basada en el comercio de productos importados que son revendidos a compradores brasileños, actividad nula en los últimos dos meses debido a la cuarentena por covid-19. Esto repercutió en el despido definitivo de miles de empleados que quedaron sin un sustento y lo cual ensombrece la situación. Los comerciantes indicaron la preocupación en cuanto al cierre de frontera, que en los últimos dos meses ocasionó millonarias perdidas en ventas, y que no se prevé pronta reapertura.
Los miembros del gremio de comerciantes señalaron que si más adelante se les permite abrir sus locales, se enfrentarán de todos modos a otros problemas, teniendo en cuenta que el comercio interno es insuficiente para mantener al sector.
Cabe señalar que apenas se ordenó el cierre de frontera, una de las primeras casas comerciales que cerró sus actividades fue el shopping China; solamente este cierre dejó a más de tres mil personas sin sus puestos de trabajo y que en forma inmediata, repercutió negativamente en la actividad económica de esta frontera.
El empresario Felipe Cogorno Álvarez, uno de los directores del shopping, señaló que el cierre de su local comercial se extenderá hasta que la pandemia sea superada y la frontera sea reabierta, por lo que aún se prevé que la reapertura lleve tiempo.
Además de otras decenas de locales comerciales que cerraron sus puertas ante la pandemia, se suma a la crisis otro factor relevante para la economía local, y es que también se cerraron las universidades que funcionan en esta frontera y a la que asisten unos doce mil estudiantes brasileños.
Universidades
Esta actividad universitaria generaba un movimiento económico importante en esta frontera, que ronda en unos USD 15.000 mensuales, según los cálculos del rubro, solo por mensualidades que pagan los estudiantes, el alquiler de departamentos, ventas de ropas, calzados y un fuerte aporte al sector gastronómico de esta capital departamental.
Con la situación actual de la pandemia en el lado brasileño, que a diario va creciendo en cuanto a número de infectados y fallecidos, hace suponer que en corto tiempo será muy difícil que los brasileños lleguen a la frontera para realizar sus compras.
Los comerciantes indicaron que solicitarán al Gobierno una serie de medidas económicas para cuando llegue el momento de reiniciar las actividades comerciales. Propondrán descuentos en impuestos municipales, IVA, energía eléctrica entre otros aportes que podrían aportar las instituciones estatales, a fin de optimizar nuevamente las fuentes de ingreso y la circulación de dinero en esta frontera del país.