Bancos adquieren IRM por US$ 432 millones
Las entidades bancarias tomaron Instrumentos de Regulación Monetaria (IRM) del Banco Central del Paraguay (BCP) por G. 2,8 billones (US$ 432 millones) en la subasta correspondiente al presente mes. La cifra es superior en 440% al que colocaron en abril último, de G. 505.000 millones (US$ 80 millones). Pese al menor rendimiento que está pagando el BCP por estos títulos, se ratifica la preferencia de los bancos por invertir en títulos del BCP antes que dar préstamos al público.
De acuerdo con los datos que obran en el portal digital de la banca matriz, la tasa pagada por el BCP por estas colocaciones para plazos entre 28 días y 180 días fue a una tasa de entre 1% y 1,3%, y para plazos de 230 días y 546 días 2,30% y 3,20%, respectivamente, muy inferior a lo que ganarían en la colocación de créditos.
Por ejemplo, los préstamos para mipymes con garantías del Fondo de la Garantía del Paraguay (Fogapy) pueden colocarse a tasa del 10% de interés. Justamente para reducir el incentivo por estos títulos, el BCP había rebajado su tasa de política monetaria desde 4% a 1,25%, pero igual las intermediarias prefieren ir por lo seguro (dejar en el BCP) y no arriesgar. A través de la colocación de IRM en el sistema, el BCP busca controlar el dinero ocioso (no colocado en créditos) a fin de preservar el valor del dinero.
Se podrá renegociar en mercado secundario
Al posibilitar “conectar” a los vendedores con los compradores de IRM (la medida aumenta el número de potenciales demandantes) este mercado se comporta como un mercado de reventa y, de esa manera, proporcionará mayor liquidez a los títulos, detalló el economista jefe del BCP, Miguel Mora, con relación a la nueva normativa que permitirá negociar los títulos en el mercado secundario de valores. Explicó también que un mercado secundario líquido permitirá, a quienes mantengan en sus carteras de IRM, puedan venderlo de inmediato. Según Mora, sin la característica de liquidez de estos títulos se afectaba la demanda de estos instrumentos en el mercado primario, que se constituía en un obstáculo para utilizar estos títulos a su real potencial.