Iglesia se reinventó con una “automisa” ayer
Una misa muy peculiar se llevó a cabo ayer en la Catedral Metropolitana, ya que los feligreses participaron de la misma desde sus automóviles. En la fiesta del Corpus Christi el arzobispo solicitó una vez más en que el Gobierno permita que más de 20 personas pueda asistir a las celebraciones.
La feligresía católica honró ayer al “Cuerpo y la Sangre de Cristo”, más conocida como fiesta de Corpus Christi. Los fieles estacionaron sus automóviles frente a la explanada de la Catedral de Asunción para escuchar la homilía de la misa central oficiada por el arzobispo renunciante, Edmundo Valenzuela. Luego se realizó la procesión del Santísimo Sacramento por las calles de la comunidad.
“Hoy, manifestamos nuestra presencia, no como individuos aislados, sino como comunidad de hermanos”, dijo Valenzuela. Aprovechó para nuevamente insistir al Gobierno que aumente el límite de personas que pueden asistir a misa (20).
“Hoy también vuelven a amenazar la libertad religiosa la corrupción y la necedad del Poder. Un sector del Poder Político que se ha corrompido gravemente y quiere someter a la Iglesia con arbitrariedades, con humillaciones, mientras se dedica al robo, a la malversación, al tráfico de influencias hasta niveles exasperantes”, comentó.
La vida es prioridad
CAACUPÉ, Cordillera (Desiré Cabrera, de nuestra redacción regional) En la misa realizada en Caacupé, el obispo Mons. Ricardo Valenzuela sostuvo que la prioridad es la vida, y dijo estar de acuerdo con la cantidad permitida de fieles. En ese sentido pidió prudencia a los devotos para que no vayan a la Basílica si están en grupo de riesgo o tienen enfermedades que los hacen vulnerables. “Es un momento difícil para todos, pero tenemos que ser responsables y no exponer a la feligresía a un contagio masivo, eso sería algo muy grave”, sentenció.