Ladrones mantienen en vilo a vecinos de barrio capitalino
Delincuentes que operan en horas de la madrugada asestaron una seguidilla de robos domiciliarios en las inmediaciones de la plaza Darío Gómez Serrato, situada en el barrio Murucuyá de la capital. La zona está ubicada en el límite mismo entre las jurisdicciones de las comisarías 10ª y 12ª de Asunción, según explicaron.
A raíz de esta situación algunos vecinos comenzaron a denunciar los hechos de inseguridad a través de las redes sociales, mientras que otros decidieron reforzar todas las medidas de seguridad para evitar que los delincuentes puedan ingresar a las residencias.
El tapicero Óscar Viveros, quien tiene su taller a un costado de la plaza Darío Gómez Serrato, aseguró que a causa de la inseguridad de la cuadra muchos vecinos prácticamente se ven obligados a vivir encerrados todo el día en sus casas. El mismo recalcó que los delincuentes que operan en los alrededores evidentemente provienen de otros sectores de la capital.
“Tras uno de los robos registrados recientemente, las cámaras de seguridad captaron a los ladrones deambulando por la zona en horas de la madrugada, para ver dónde pueden atacar, por ello todos los comercios que tenían puertas de vidrio templado ahora reforzaron la seguridad con rejas de metal”, dijo Lourdes Armoa, quien tiene una peluquería a media cuadra de la plaza.
La última víctima de los delincuentes fue César Augusto Ibarra (22), a quien le robaron una motocicleta en la madrugada de ayer del interior de su casa, ubicada frente mismo al lugar de esparcimiento del barrio.
El joven mencionó que adquirió hace poco más de un año la moto para trabajar y que todavía le falta abonar 10 cuotas de 372.000 guaraníes por ella.
El jefe de la comisaría 10ª de Asunción mencionó que dicha zona efectivamente esta en el límite entre su jurisdicción y la comisaría 12ª. El jefe policial aseguró que tras las últimas denuncias dispuso aumentar los controles y las patrullas en las calles aledañas de la citada plaza, especialmente en horas de la noche y madrugada, para evitar que se registren otros hechos de robo.