Ediles desacatan orden judicial
CAAZAPÁ (Antonio Caballero, corresponsal). Los concejales municipales, que fueron echados de la corporación legislativa por sus pares, supuestamente por raboneros, no pueden recuperar sus bancas, pese a la medida cautelar a favor dictada por el Juzgado Electoral de Villarrica y Caazapá.
El pleno de la Junta Municipal busca distintas artimañas para impedir que los dos concejales puedan recuperar su puestos.
Los concejales afectados son: Éver Méndez (Frente
Guasu), Humberto Ruiz (ANR, cartista) y Camila Sarubbi (ANR, cartista), quienes al ser separados de sus respectivos cargos recurrieron al Juzgado Electoral solicitando una medida cautelar que fue favorable a sus pretensiones. Sin embargo, en la semana que salió la resolución judicial ordenando la reposición de los mismos, la presidenta de la Junta Municipal Gladys Rojas (FG) decidió suspender la sesión para fumigar la sala de plenaria.
La medida cautelar tiene fecha 2 de julio y desde entonces no se realizan más las sesiones.
Según los datos, desde hace tres semanas la presidencia de la Junta Municipal acordó con sus pares visitar las obras que el intendente Victoriano López (ANR) lleva adelante en las diferentes instituciones escolares del distrito.
El lunes último, la sesión plenaria fue levantada antes de tratarse el punto 1 del orden del día, estando presentes los concejales destituidos y los suplentes.
En ese sentido, Camila Sarubbi una de la afectada dijo que no entiende lo que ocurre, “es un desacato a la orden judicial, levantaron la sesión para que no ocupemos nuestra banca. A los tres concejales que estamos en litigio nos hicieron firmar una planilla de asistencia diferente a los otros concejales”, expresó.
Méndez, por su parte, indicó que “cualquier cosa hacen para evitar que volvamos a nuestra banca”.
Esta corresponsalía intentó hablar varias veces con la presidenta de la Junta Municipal Gladys Rojas, pero sin éxito.