En Brasil, tema energético es central
Mientras en Paraguay se habla de una “agenda oculta” del Gobierno sobre la renegociación del Anexo C del Tratado de Itaipú, en Brasil el tema es central. De eso y otros temas como el proceso de privatización de Eletrobras, la emisión de bonos soberanos a cuenta de Itaipú y el reflote de la ley de la industria eléctrica debatieron el sábado último en el segundo seminario-taller “¿A dónde van las negociaciones del 2023? El libreto de Itamaraty”. Es una actividad impulsada por la Campaña Itaipú ñane mba’e y organizaciones sociales del Brasil, para entender el contexto de la renegociación del Anexo C del Tratado de Itaipú.
Robson Formica, de la Coordinación Nacional del Movimiento de los Afectados por las Represas (MAB) de Brasil, una organización que tiene casi 30 años, mencionó que en el 2022, Brasil cumple su bicentenario de independencia y que el tema energético en su país es central. “Se tiene un elemento simbólico más para discutir esto”, indicó.
Recordó que al inicio de 2019, un representante suplente de senador, muy ligado al presidente Jair Bolsonaro, hizo de portavoz de la familia Bolsonaro en Paraguay.
“Pidió exclusividad para la empresa llamada Leros para negociar el excedente de la energía generada por Itaipú en el mercado brasileño, y esto resultó en una fuerte reacción en Paraguay que derrocó incluso al canciller. Esto ya delimita, desde el inicio, las intenciones de este gobierno”, señaló en referencia al Acta Bilateral.
A su turno, Fabiola Latino Antezana, trabajadora de Eletrobras, directora del Sindicato de Urbanitarios de Brasilia y vicepresidenta de la Confederación Nacional de Urbanitarios, resaltó que Eletrobras tiene hoy casi 52% de la energía almacenable del Brasil en forma de reservorios de agua, casi la mitad de las líneas de transmisión que son operadas en el país y es la quinta mayor generadora hidroeléctrica del mundo. “Cuando vemos los otros países que le dan la importancia a la generación hídrica, como China, Canadá y Estados Unidos, uno ve que son países que tienen una estructura de estado cerrada y fuerte sobre los intereses de soberanía nacional, pero Brasil no tiene eso y está como regalando a las empresas, a los intereses que vienen de afuera. Eso afecta a Itaipú, dado que la empresa fue hecha en un tratado internacional que impacta a Brasil y Paraguay”, mencionó.
Agregó que llama la atención, en el escándalo de Leros, “que son grupos internacionales que entran a nuestros países y se van apoderando de la estructura por adentro”.
Hay una “agenda oculta”
Por su parte, Lis García, investigadora e integrante de la Campaña Itaipú ñane mba’e, señaló que “la misma claque de poder que continúa teniendo al Estado es la que propone como parte de la agenda oculta del gobierno, que sigue el libro Itamaraty, como una de las propuestas centrales, la emisión de bonos soberanos que es un peligro porque implicaría que la Itaipú se convierta en una institución financiera”.
Mencionó que otro elemento que da cuenta de la “agenda oculta que lleva el gobierno” es el resurgimiento del proyecto de reforma del sector eléctrico. “Este proyecto ya viene de antes y volvió a tomar cuerpo durante la crisis económica profundizada por la pandemia. La propuesta es la privatización de la energía a partir de la concesión a las empresas privadas de la comercialización de la misma, lo que implicaría el poder del sector privado de este enorme recurso y que el costo de la energía se mantuviera porque estaría condicionado a los intereses de lucro de las empresas privadas”, resaltó.