Agresion despiadada a la naturaleza
Los arroyos Itay y Yukyry (foto) son importantes recursos naturales de Central y están gravemente afectados por basura arrojada por pobladores “puercos”, por residuos cloacales y fabriles. Uno de ellos nace en Capiatá y el otro en Fernando de la Mora, ambos tienen un largo recorrido. Muchos afluentes más están igual de contaminados. Las instituciones nada hacen en busca de dar solución.
SAN ANTONIO (Higinio R. Ruiz Díaz, corresponsal). El arroyo Guasu que cruza por esta ciudad continúa sufriendo una inmisericorde contaminación de parte de curtiembres e industrias instaladas en las inmediaciones. La Municipalidad y el Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades) no emprenden acciones ni castigo para los responsables de crimen ambiental.
El cauce hídrico en forma constante presenta colores característicos y emana un fuerte hedor que cubre gran parte del barrio San Francisco. El arroyo nace en la ciudad de San Lorenzo, cruza por los municipios de Ñemby, Villa Elisa y San Antonio para luego desembocar en el río Paraguay.
Algunos pobladores residentes en las inmediaciones expresaron que están cansados de denunciar a la Municipalidad local la contaminación del recurso hídrico. Indicaron que el color del arroyo varía constantemente. Hay días que se tiñe de rojo y otros de negro, pero siempre despide un olor nauseabundo que invade las casas, señalaron.
El intendente local, Raúl Mendoza (PLRA), prometió verificar el sector del arroyo que cruza por la ciudad de San Antonio. “Vamos a verificar dentro de nuestro municipio, porque el arroyo cruza por varias ciudades y tenemos la información que una fábrica de vaqueros (sin dar nombre) de Villa Elisa está tirando sus desechos”, dijo.