Trabajadores de la salud vaticinan nefastas consecuencias para el 2021
Las contrataciones de este año, la ampliación en camas de terapia y la construcción de hospitales de contingencia serán principales problemas, aseguran desde la Federación Nacional de Trabajadores de la Salud.
El Presupuesto General de la Nación 2021 y la presentación realizada el viernes último por el doctor Julio Mazzoleni, titular del Ministerio de Salud Pública (MSPBS) frente a la Comisión Bicameral, vaticinan nefastas consecuencias para el año que viene, aseguran desde la Federación Nacional de Trabajadores de la Salud. Según explicó el ministro de Salud, el presupuesto asignado para el 2021 no garantiza la sostenibilidad, por lo que se requeriría un adicional de G. 1,3 billones.
Al respecto, los trabajadores de la salud manifestaron su preocupación con relación al déficit en recursos humanos, ya que además de la vacancia histórica existente en los servicios hospitalarios, con el presupuesto 2021 también se corre el riesgo de no poder mantener las contrataciones realizadas este año en el marco de la pandemia del covid-19. “Los contratos realizados este año por la emergencia son apenas de tres o seis meses. Nuestro déficit histórico en salud es de al menos unas 15.000 contrataciones para diversas áreas. Ahora no sabemos qué va a pasar con ese personal contratado o cómo se van a mantener los hospitales de contingencia, las salas de terapia intensiva ampliadas este año sin personal médico”, dijo ayer el doctor César Pimienta, miembro de la Federación.
Destacó que la falta de planificación obligó a la construcción o habilitación de hospitales de contingencia, con unidades de terapias intensivas, laboratorios biomoleculares o camas de internación que funcionan con contratos ocasionales, utilizando rubros con código de emergencias covid de duración limitada. “Los inconvenientes continuarán agravados por nuevos escenarios que amenazan a la salud. En corto tiempo cerrarán por falta de personal. Al no contemplar el aumento de presupuesto para las residencias médicas de terapistas, estos serán imposibles de formar y continuaremos con déficit de especialistas”, dijo.
Entre los muchos inconvenientes que se espera para el año que viene, la Federación también destaca los insumos médicos, equipos de protección individual o mantenimiento de equipos biomédicos costosos adquiridos o donados y cuyo presupuesto no está contemplado. “La pospandemia será dura y tendrá sus nefastas consecuencias en los servicios de salud, sobre todo en los que tuvieron crecimiento acelerado y no planificado”, aseguran.