Un cambio desde 1972
En nuestro país, en octubre de cada año se adelanta una hora en los relojes y se vuelven a atrasar 60 minutos en marzo del año siguiente. Esta práctica se viene realizando en nuestro país desde 1972. El argumento de la ANDE sobre esta práctica de adelantar una hora los relojes en época de verano se basa en la intención de alivianar la demanda de electricidad, que normalmente alcanza sus picos más altos en ciertas horas de esa temporada, cuando se sobrecargan las redes de transmisión y distribución, ocasionando los cortes de suministros de energía eléctrica. La ANDE ahora dice estar preparada.