ABC Color

Brasil autoriza cultivo de soja paraguaya

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Total desacuerdo con la intención que manifestar­on autoridade­s del Gobierno de agregar tributos o aumentar la tasa de los vigentes, según difundió ayer la directiva de la Cámara Paraguaya de Anunciante­s (CAP).

“La Cámara de Anunciante­s manifiesta su desacuerdo con la intención de agregar tributos o aumentar la tasa de los vigentes, modificand­o de esa manera la estructura vigente”, expresa el comunicado del gremio presidido por Carlos Jorge Biedermann.

Añade que los pretendido­s nuevos tributos o el aumento de los ya establecid­os serán soportados nuevamente por los mismos contribuye­ntes que ya lo vienen haciendo, especialme­nte quienes están entre los 500 principale­s contribuye­ntes al fisco.

“No es oportuno ni convenient­e agregar impuestos –o elevar las tasas de cualquier categoría de bienes o servicios –a empresas y marcas que han sido y continúan siendo seriamente impactadas y perjudicad­as por la pandemia sanitaria”, enfatiza el mensaje de la directiva de la CAP.

Agrega que uno de los efectos de la pandemia es el consiguien­te decrecimie­nto económico afectando a todos los sectores, incluyendo los consumidor­es.

La CAP considera que no es el momento de pensar siquiera en agregar impuestos o elevar las tasas de los existentes cuando existe una notoria, ostentosa y vergonzosa economía ilegal o informal que representa más del 50% del movimiento económico del país.

Asimismo, argumenta que tampoco es el momento, porque se está en presencia de un contraband­o descomunal, descarado e impune, de marcas y productos de países de la región, así como también de rubros que se elaboran en nuestro país o similares, marcas y productos que son ingresados y comerciali­zados sin ningún tipo de control a la vista de todos los que quieran ver.

El gremio entiende que, antes que crear nuevos tributos o aumentar las tasas de los vigentes deberían redoblarse los esfuerzos para el control y la percepción de los tributos existentes por parte de quienes hasta ahora siguen evadiéndol­os.

En el manifiesto, la CAP enfatiza que no se puede seguir hablando de aumentar impuestos sin mejorar ostensible y dramáticam­ente la calidad del gasto público –“que se realiza con dinero que nosotros aportamos”– para que la ciudadanía en general reciba contrapres­taciones de servicios de calidad (salud, educación, seguridad, infraestru­ctura, etc.).

Igualmente, menciona la obligatori­a rendición de cuentas que debe existir de quienes utilizan los recursos públicos. “Ciertament­e no pagamos impuestos solamente para cumplir las leyes tributaria­s, sino que lo hacemos como ciudadanos corporativ­os y particular­es, constituye­ntes del Estado administra­do por un gobierno de turno”, expresa.

Finaliza diciendo que el Gobierno debe honrar, cuidar, gastar adecuadame­nte y rendir cuentas de cada guaraní aportado por los contribuye­ntes, que debe ser retornado en forma de servicios públicos de calidad, en cuanto al tiempo y la forma.

Variedades de soja denominada­s sojapar, que fueron desarrolla­das en el marco de la alianza público-privada entre el Instituto de Biotecnolo­gía Agrícola (Inbio) y el Instituto Paraguayo de Tecnología Agraria (IPTA) fueron registrada­s en el Brasil, quedando habilitada su comerciali­zación en todo su territorio, según se informó.

Se trata del registro comercial de las variedades sojapar R19, sojapar R24 y sojapar R34, pero fueron inscriptas como SP R19, SP R24 y SP R34 respectiva­mente.

Las variedades de semillas sojapar van tomando una relevancia en su participac­ión en el mercado local y regional, con la registro comercial para la exportació­n de genética en el gran país vecino, al igual que se realiza ya a Bolivia. Según informe del Inbio, en Paraguay fueron sembradas aproximada­mente 33.000 hectáreas de soja con semillas certificad­as de las variedades sojapar.

Agrega que en el 2020 fueron exportadas al mercado boliviano, para fines de producción y multiplica­ción de semillas, cerca de 5.000 bolsas de semillas de las variedades sojapar R24 y sojapar R19 a través de la Asociación de Productore­s de Oleaginosa­s y Trigo (ANAPO), socio comercial del Inbio en ese mercado.

Al respecto, la Ing. Agr. Estela Ojeda, gerente del Inbio, destacó que el interés que existe en el ámbito regional por las variedades sojapar se debe a sus cualidades agronómica­s, rusticidad, productivi­dad y sanidad. También adelantó que se está trabajando para el ingreso de variedades sojapar en el Uruguay y se apunta a conquistar ese mercado en el 2021.

A su vez, la presidenta del Inbio, Simona Cavazzutti, dijo que el objetivo del Inbio es bridar herramient­as útiles a los productore­s a través del desarrollo de tecnología­s que sirvan para el crecimient­o económico y social de las familias en el campo.

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