Abogado debe ser investigado
El misterioso abogado Abel Germán Ávalos, que debía cobrar US$ 2,8 millones del acuerdo secreto con Texos, se expone a una investigación penal por cobro indebido de honorarios, pues es funcionario permanente de la Justicia Electoral, según la Senac. Resalta que otros abogados realizaron todo el trabajo y que el funcionario público solo figuró para cobrar. “Ávalos, siendo un funcionario público, se hace acreedor de unos honorarios profesionales que surgen de un litigio judicial entablado contra los intereses patrimoniales del Estado. Siendo el tipo legal de cobro indebido de honorarios”, indica.