Peligrosos criminales comandaron el caos
El vocero de los presidiarios, Arsenio Erico Alvarenga Sosa, alias Pacu’i, quien negoció la vuelta de la paz en el penal a cambio de que no haya represalias, es el segundo al mando del clan Rotela, dirigido por Armando Rotela Ayala. Este último es considerado como el “zar del microtráfico” de drogas. Lidera una de las dos facciones mayoritarias que hay en el sistema penal.
El clan Rotela rivaliza con la banda Primer Comando da Capital (PCC). Este último grupo está en decadencia en la cárcel de Tacumbú actualmente.
Arsenio
Alvarenga
en 2016 causó un escándalo en filas del Gobierno al demostrar la fragilidad del sistema de seguridad, luego de que haya robado tres fusiles de guerra, una pistola y cargadores, al atacar la camioneta blindada del entonces viceministro de Seguridad Interna, Javier Ibarra, quien tras este hecho no tuvo más opción que renunciar.
De hecho este caso también hizo tambalear a Francisco de Vargas, entonces ministro del Interior. Alvarenga forma parte del esquema en el que son socios Orlando Efrén Benítez Portillo y Armando Javier Rotela Ayala.
Esos dos últimos pretendían escapar del penal de Tacumbú junto con otros presos, pero sus planes se frustraron con el traslado de Efrén Benítez a la Agrupación Especializada tras filtrarse el plan al Ministerio de
Justicia.
Ya el 25 de noviembre de 2012, Orlando y Armando habían protagonizado una fuga del penal de Misiones.